se comió a mi mamá - Relatos Eróticos

se comió a mi mamá

... relaciones conmigo”. -“ pero claro que quiero tener relaciones contigo” respondió mi mamá todavía dándole besos en la verga, la cual ya estaba toda pintada de rojo por las marcas que dejaba el colorete de mi mamá en todo ese lienzo largo y ancho: “quiero que te quede bien claro que yo soy tu putita, que puedes hacer conmigo lo que se te antoje, que tienes estas nalgas grandes, duras y paraditas para que las disfrutes a diario, que estas tetas firmes y redondas están a tu disposición para que te hagas una paja rusa cuando quieras, y que esta boquita lo único que sabe hacer es empezar a babear cuando ve esta pija tan inmensa, no me puedo resistir las ganas de mamártelo a cada rato; todas estas noches me he masturbado pensando en las culeadas tan ricas que me pegas por las tardes” le dijo mi mamá como si estuviera enamorada: “lo único que te pido, es que cuando se te antoje garcharme por el orto, por favor mete solo la puntita, debes entender que mi anatomía no esta preparada para recibir semejante polla por el culo, y lo otro que no puedes hacer es contarle a Luisito de lo nuestro”. Pipe la levanto tiernamente cogiéndola de la cintura y le dio un beso muy apasionado, se notaba que ella lo disfrutaba por que lo acariciaba en la cara mientras el metía la lengua en su boca, acto seguido ella lo cogió del pene y lo jaló hasta su habitación, esperé un momento, subí las escaleras y sigilosamente me asomé para ver como mi mamá otra vez arrodillada le daba ...

... cabezazos al pene de Pipe. Esa imagen era extraña: Pipe era el típico niño flaco, pálido de lo blanco que era, bajito y con gafas que difícilmente tiene suerte con las mujeres por su apariencia; pero desnudo, era todo un semental, es como si su cuerpo hubiera enviado todos los nutrientes, toda la energía y todo el desarrollo a una sola zona de su cuerpo… su imponente pene, el cual se encontraba siendo apretado por los labios de una mujer hermosa, con tremendas tetas, un cuerpo firme y bien cuidado, una piel suave y el mejor culo de la historia, paradito, grande y firme… Mi mamá. Luego mi mamá se puso en cuatro patas sobre la cama, Pipe empezó manosear el firme culo de mamá, le quito el pantalón, luego la ropa interior y suavemente metió su pene en la concha de mamá, progresivamente empezó a subir el ritmo hasta que empecé a escuchar otra vez ese sonido intenso de las nalgas de mi mamá chocando con la pelvis de otro hombre, y es que la cola de mi mamá se veía tan rica que ni Augusto ni Pipe se habían aguantado las ganas de embestirla con fuerza, otra vez mi mamá empezó a gemir pero esta vez de placer, ella le decía a Pipe : “dale mi amor, no pares, cómeme que soy toda tuya, mi concha está empapada, dame más durito que me voy a correr…” yo no quería aguantarme otra vez esa escena, me fui de la casa al cine, pero esta vez tranquilo, sabiendo que si tenía que aguantarme a alguien culeandose a mi linda mami, que fuera mi mejor amigo y no el hijueputa de Augusto.