Tuve una noche completa a mi suegra
Fecha: 10/11/2017,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues
Soy Juan Carlos de 28 años, casado con Elena de 27, la menor de 3 hermanos. Vivimos a solo unos dos minutos de mis suegros. Y quiero confesar que mi suegra, que llamaré Eva, es toda una hembra, que mi estimado suegro ha dejado casi olvidada. Ella aún viste bien, acorde a su edad, pero sexy, siempre es vivaracha, de joven creo que fue una mujer tremenda, pues tiene tatuada su espalda y arriba de su tobillo izquierdo. Tiene dos enormes senos que aún conservan cierta dureza y desafío a la gravedad. Un culo en forma de corazón grande y dos enormes ojos verde oscuro. Desde que estuvimos de novios con mi ahora esposa, hubo cierta atracción entre ambos, nos delataban miradas furtivas, pero nunca pasó a más hasta casarnos con Elena. Luego ya como familia, las atenciones de mi suegra fueron mayores y yo también la halagaba con palabras sobre lo bien que conservaba su cuerpo y es que es cierto. He visto como amigos de mi suegro la ven con mucho deseo, pero ella nunca les dio lugar. Pero mi deseo se marcó un día que fuimos a la playa, yo quería ver a mi suegra en traje de baño, la animé a que se bañara y por fin se fue al vestidor, cuando salió me dejó con saliva en la boca, se puso un bikini, no diminuto, pero si audaz y se veía deliciosa todavía, la mayor parte de sus carnes aún estaban duritas, sus senos apenas cabían en el traje, su marido, mi suegro, la regañó por ponerse algo asi, pero yo intervine y le dije que debía sentirse orgulloso de tener una mujer con tres hijos y tan ...
... linda. Mi suegra me agradeció lo que dije, al igual que mi esposa. Mi esposa, mi suegra y yo nos metimos al mar, luego de un rato mi esposa dijo que quería tomar el sol y se fue, me dejó con mi suegra, quien charlando me dijo que no sabía nadar, le contesté que no se preocupara que yo era un experto nadador. A propósito la fui metiendo más y más hasta que el agua nos llegaba a los hombros, ella sintió miedo y le dije que se aferrara a mi, primero solo me tomó del brazo, pero hubo un momento que sus pies ya no tocaban el fondo y se asustó, se aferró a mi, esta vez sus piernas me rodearon la cintura y sus brazos mi cuello, yo le dije que tranquila, que flotaríamos, asi lo hicimos, solo que nuestros rostros quedaron a centimetros, su busto contra mi pecho, y además podía sentir su raja pegarse a mi paquete que no era ajeno a lo que pasaba, mi verga iba en aumento y creciendo. Como tenía que mover las piernas para avanzar en el agua, provocaba una frotación entre su pelvis y la mía, en dos minutos mi verga estaba empalada y su pelvis frotandose, la vi y ella también estaba excitándose. -ayy dios santo!- dijo, le pregunté si le pasaba algo, sabiendo yo que estaba mojándose. -nada, nada- espero que ya lleguemos a un lugar más bajo. Yo floté y le pasé las manos por sus muslos, de verdad estaba buenota mi suegra. Entonces moví más rapido mis piernas y a propósito mi pelvis como si estuvieramos follando de verdad, el rozamiento de nuestros sexos fue bárbaro, yo vi que ella cerraba los ...