1. Me Desvirgó Mi Primo


    Fecha: 10/11/2017, Categorías: Gays Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    Con el hijo de la hermana de mi madre, Tomás, siempre fuimos muy amigos. Un verano fuimos con el grupo de Boys Scouts a pasar unos dias en la montaña. Compartíamos la misma carpa y a las 22 sonaba la corneta de retreta y había que irse a la cama. Nosotros seguiamos conversando despacio en la carpa y escuchando música. Una noche estábamos muy calientes ya porque hacia varios dias que no habiamos podido hacernos la paja, y éramos de paja diaria, incluso nos la hacíamos juntos mirando películas porno. Yo me empecé a sobar la verga y él hizo lo mismo. Enseguida las teníamos totalmente erectas. El me dio una sorpresa, apoyó la pierna sobre mi pija. Yo lo dejé que me la sobara con su rodilla. Al rato, me dijo, desnudémonos. Yo me quité el slip y la camiseta y él también. Estábamos totalmente desnudos debajo de la bolsa de dormir. Empezó a hablar de cosas que nos ponían muy calientes y de repente me tomó la pija y me hizo la paja. “Despacio que me vas a hacer acabar”, le dije. “Querés coger?”, me dijo. “Con quién, con el cura Sargento?”, le dije. El se rió y me dijo, “conmigo, boludo. ” Yo, muy inocente, le pregunté, “Como?”. El se dio vuelta y me apoyó las nalgas en mi pija, que estaba a mil grados. Yo se la dejé apoyada entre sus nalgas y él empezó a apoyarlas contra mi verga mientras me acariciaba las bolas. En eso, buscó un pomo del bolsillo de la carpa y se lubricó el culo. ...
    ... “Dale, cojeme, cojeme!”, me pidió, desesperado. Yo estaba muy sorprendido porque nunca se me habia mostrado como gay, pero estaba tan caliente que empecé a pujar. El me tomó la pija, se la colocó en el ano y fue empujando para que entrara. “No cojiste nunca ?”, me dijo. “No, una sola vez traté pero no lo pude hacer porque la piba era muy boluda”, le respondí. “Bueno, no vas a seguir con la paja eternamente, desvirgate conmigo”, dijo Tomás, y de repente mi pija estaba ya adentro hasta la mitad. El jadeaba de placer mientras se movia para que le entrara toda. Yo le di con fuerza y le causé un dolor que lo hizo gritar. Nos quedamos mudos de miedo de que nos hubieran oído desde las carpas vecinas, pero nada alteró el silencio de la noche en la montaña. En un rato mas lo habia penetrado totalmente y le di un buen rato verga pelada. “Acabate adentro”, me dijo. Hice dos movimientos mas y me estremecí mientras le soltaba tres chorros en el culo. El se dio vuelta, apoyó la cabeza sobre el pecho y me empezo a besar las tetillas y la boca mientras me apoyaba la verga sobre la mia y hacia movimientos como para cojerme en ese lugar. Haciendo eso soltó un buen chorro encima de mis bolas. Enseguida ambos nos quedamos dormidos. Al dia siguiente le hice muchas bromas sobre el grito que habia pegado porque le habia roto el culo. El me respondió que tenia que agradecerle porque me habia cogido. 
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