1. la venganza a mi hermana mientras duerme


    Fecha: 14/07/2021, Categorías: Dominación / BDSM Autor: hellydoiloz120, Fuente: SexoSinTabues

    ... nena reventara, solo quería saciar mis deseos. Llegó el momento en que mi sobrinita abrió ligeramente la boca, e inmediatamente después inundó toda su cuevita de sus líquidos. El placer era extremo, yo tenía para rato, pero disfrutaba con cada penetración como si me estuviera corriendo de verdad. Después de un buen rato le saqué la pinga de su conchita, para luego muy despacito darle la vuelta y ponerla boca arriba, la nena no se movía, parecía que estaba muerta, en un principio me asuste, pero luego de igual modo proseguí con la faena. Una vez que estuvo boca arriba, la abrí de piernas lo más que pude, su hermosa concha se abrió levemente ante tal acto, luego coloqué mi glande en la entradita de su conejito, de un solo tirón le enterré todo mi pene en su vagina, al hacer esto mi sobina se movió levemente y puso una de sus manos en su clítoris, movió un par de veces sus deditos y luego se quedó quieta. Sin importarme la fui follando muy salvajemente, metía y sacaba mi pichula por su delicada cuevita, miraba hacia abajo y observaba como sus labios vaginales se abrían para recibir mi polla. Mi sobrinita cada vez respiraba más profundamente, se empezaron a escuchar sus suspiros, la nena movía de lado a lado su cabeza,al parecer seguia respirando y se quejaba. Incrementé aún más las envestidas, llegó el momento en que el coito era extremo, pasó unos segundos y pude sentir como se humedecía toda su deliciosa vagina. Había perdido la razón, pronto sentí indicios de una inminente ...
    ... eyaculación, pensaba en correrme adentro o fuera, quería hacerlo adentro para sentir más placer aún, pero el remordimiento me traicionaba ¿Qué tal si sale embarazada?-me rondó en la cabeza este pensamiento, al final de tanto pensar no pude evitar correrme en lo más profundo de sus entrañas. El polvo fue riquísimo sentir como le inundaba la concha a mi sobrina me daba mucho más placer, había perdido el juicio, ya no era yo, ahora era un vil y asqueroso delincuente, después de correrme adentro me sentí como un canalla, como un maldito violador, y había violado nada menos que a mi propia sangre. Saqué mi pichula de la rajita de ella, luego empecé a contemplarla, en verdad estaba rica, muy hermosa, se le veía muy sexy con el pelele subido para poderla penetrar, tenia su rostro en un tono palido y su mirada perdida sin ninguna expresion como si estuviese teniendo un delicioso sueño húmedo. Miré hacia su rajita y no pude evitar tener ganas de probar a esa jugosita vagina, sin remordimientos fui hacia ella, me ubiqué cerca de su concha, pasé uno de mis dedos en su clítoris y le di un pequeño besito, estaba muy duro y apetecible. Acerqué mis labios y los posé en su ardiente vulva, hacía que mi lengua roce entre los calientes pliegues de su vagina. Mi lengua recorría toda esa conchita, de abajo hacia arriba, le lamía todos los jugos que salían de ese delicioso agujerito. se notaba que estaba excitadísima. Me centré en sus labios vaginales, los lamía, los succionaba, los sobaba con mis ...
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