1. Cristina (2)


    Fecha: 14/08/2021, Categorías: Confesiones Autor: Quique., Fuente: CuentoRelatos

    ...Y como yo no soy nadie, voy a contarles el resto de la historia.
    
    Cristina, estaba en la piscina, en su chalet, echada en una hamaca con un bikini azul de Calzedonia y unas gafas de sol Dior Homme. Mariola, llegó con un mono corto rojo y unas zapatillas de deporte rojas. Al verla, a Cristina, se le iluminó la cara, y al llegar a su lado, le dijo:
    
    -Tenía muchas ganas de volver a hablar contigo, Mariola.
    
    Mariola, se sentó en una hamaca, al lado de Cristina.
    
    -Por tu cara de felicidad deduzco que ya sabes lo que es tener un orgasmo.
    
    -¡Sí! ¡Es algo maravilloso!
    
    Mariola, miró a los ojos a Cristina, y le dijo:
    
    -La verdad es que me hubiese encantado ver como tenías tu primer orgasmo, pero era muy peligroso... para ti.
    
    -¿Por qué? -le preguntó Cristina, extrañada.
    
    -Porque soy muy golosa... Me gusta comer lo prohibido.
    
    -¿Y eso que tiene que ver con que me vieras tener mi primer orgasmo?
    
    -Que me gusta comer almejitas y...
    
    -Y a mí el chocolate, pero no le veo la relación.
    
    Mariola, mirando para las tetas de Cristina, le dijo:
    
    -Si quisiera seducirte, bueno, quiero, pero la llevo clara.
    
    -Estás equivocada. Vas bien, pero irías mejor si no te anduvieras por las ramas.
    
    -Pues dejaré de andar por las ramas. Si llego a ver cómo te masturbas, no te ibas a correr con los dedos.
    
    Cristina, seguía en su mundo.
    
    -Si no acabé corriendo, Mariola. ¡Acabé espatarrada! Espatarrada y media muerta de placer,
    
    -Correrse es tener un orgasmo, ...
    ... Cristina
    
    -¡¿Sí?! ¿Y si no tenía el orgasmo con los dedos, con que lo iba a tener?
    
    -No tires de mí que te lo digo.
    
    Cristina, se sentó en la hamaca y se puso mimosita.
    
    -Lo quiero saber, y quiero tener un orgasmo de esa manera.
    
    -Vale, te lo diré. Te haría correr con mi lengua.
    
    -¡Lo sabía! Cuando me besas con lengua me excito tanto que lo podría tener. ¡Claro que lo podría tener!
    
    -Joder, joder, joder,
    
    -¿Qué?
    
    -Que con tu ingenuidad me estás poniendo como una moto.
    
    -Lo siento, no quería ofenderte.
    
    Mariola, bajó la cabeza, sonrío, la miró y le dijo.
    
    -Tu inocencia te hace única. ¿Qué voy a hacer contigo?
    
    -Mi padre y mi madre no están en casa. Bésame, Mariola, bésame hasta que llegue al orgasmo.
    
    Mariola, ya se lanzó a la aventura. Se dieron un beso largo, muy largo. Las dos se iban mojando, a medida que entrelazaban sus lenguas. Cuando Mariola, separó los labios de los de Cristina, Cristina, le preguntó:
    
    -¿Por qué paras?
    
    -Porque este no es el sitio adecuado. Podría llegar tu padre.
    
    -Por mi padre no te preocupes. Volvería a sacar el pene y se lo sacudiría.
    
    -¡¿Qué acabas de decir?!
    
    -Que volvería a sacar el pene y se lo sacudiría. Ayer vi como lo sacudía mirando cómo me masturbaba.
    
    -¡Joooooder con papaíto! ¿Cómo tenía la polla?
    
    -¿Qué polla?
    
    -El pene, el falo, la verga.
    
    -Gorda, gorda y larga. ¿Sabes que deseé cuando lo vi?
    
    -No, sorpréndeme.
    
    -Que entrara en la habitación y me besara.
    
    -Si entra te iba a besar, sí, el ...
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