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Deliciosa
Fecha: 23/08/2021, Categorías: Sexo Oral Autor: JulioG, Fuente: CuentoRelatos
Gimes. Suspiras. Tus gemidos me excitan y me excitan muchísimo preciosa. Me encanta lamerte, saborearte... Me gusta poseerte con mi lengua. Me gusta oír tus gemidos de placer. Me excitas. Me calientas. Me retiro para contemplarte. Veo esos preciosos ojos llenos de pasión. Estas excitada y caliente, abierta de piernas en tu cama. Ofreciéndome tu sabrosa vagina para que te coma. Sé que te gusta. Que disfrutas cuando mi lengua acaricia tu clítoris. Y eso me hace enloquecer de placer. Sentir tu placer. Mmmmm... Tus movimientos... Cuando tu cuerpo se tensa por culpa de mi lengua... -Jajaja como me gustas así. Derretida por mis caricias. Desmadejada. Saber que disfrutas. -Sigue.- Me pides. Me suplicas. Sonrío. Me sacas de mi contemplación. Y me vuelvo a introducir entre tus piernas, volviendo al ataque. Agarrando tus muslos y poseyendo esa rica y sabrosa vulva, que me encanta sentir, chorreante de tus ricos jugos. Me los bebo. Los deleito. Te devoro. Te saboreo. Con pasión. Con locura. Con ansia. Levantas tu pelvis para tener más ...
... contacto. -Oooohhh, Aaaahhhh. Jadeas, te retuerces en la cama. Agarras las sabanas. Te falta poquito. Y eso me gusta. Es el mejor momento. Es cuando más me gustas. Cuando estas a punto de llegar a tu punto culminante. Justo antes de tu explosión de placer. En este momento que estas descontrolada. Llena de excitación. Estas al máximo. Llena de lujuria. Llena de pasión. Con ese calor interno que sube y sube. Cuando empiezas a sentir dentro de tus entrañas el inicio de esa sensación de la inminente descarga eléctrica. Me encantas. Siento tus vibraciones. Siento como te tensas. Oigo tus jadeos y suspiros. Éstos me enervan y me excitan. Oírte así me pervierte jajaja. Y por fin llegas y explotas como un volcán. Te tensas, arqueas tu espalda y te aprietas contra mi boca. Me encantas. Llegas al límite de tu disfrute. Y me llenas la boca con tus ricos jugos. Muestra de tu delirio de placer. Sabrosa, deliciosa... Y caes relajada. Me incorporo y te vuelvo a contemplar. Satisfecha. Veo las areolas de tus pezones contraídas por el placer conseguido. Sonriente... Preciosa... Mi diosa...
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