Divinas tentaciones by santiago - Relatos Eróticos

Divinas tentaciones by santiago

Lola, lolita es fácil recordar lo primero en lo que me fije la primera vez que la vi, creo que es en lo que cualquiera se fijaría y es en ese culo tan rico y provocativo que tiene, que dan ganas de apretárselo a penas las vez.

La vi en la universidad resaltaba por la manera en que vestía se notaba de lejos que era extranjera, llevaba unas medias negras que se ajustaban perfectas a sus piernas y un short gris que terminaba justo donde empezaban a pronunciarse sus nalgas. En ese momento fue cuando pensé “Dios ese culo, debo tenerlo”.

No parecía muy atrevida y me acerque con la excusa de ser su amigo y mostrarle las cosas interesantes de nuestro país, la muy inocente acepto encantada y así empezó todo. Comenzamos a hablar más seguido y a chatear casi todo el día y a salir frecuentemente, pronto nuestras conversaciones se fueron poniendo bien sucias, yo muy "inocentemente" era el que comenzaba a hablar de sexo y así ella me seguía la corriente, hasta que un día me dice que tenía mucho sin hacerlo, y yo como sabía lo que quería pues me ofrecí a ayudarla a quitarse esas ganas que traía, a todo esto todo parecía ser en broma, hasta que un día nos retamos a que ninguno se atrevía a hacer las cosas que nos decíamos cuando hablábamos y fue donde supe que lo podía conseguir.

Mi madre se había ido de viaje así que era noche de fiesta y le ofrecí a Lola quedarse en mi casa para no tener que llevarla después a la de ella, y acepto. Después de rumbear toda la noche era hora de ...

... dormir ella entra al cuarto a cambiarse y ponerse algo más cómodo. Yo sabía que Lola dormía desnuda o en ropa íntima porque me lo había dicho, así que esperaba entrar al cuarto y encontrarla con un sexy conjunto de encaje, para mi desgracia llevaba unos pantalones a la rodilla y una camisa.

Pero yo estaba con muchas ganas esa noche así que me acosté a su lado la voltee hacia mí y la comencé a besar, cuando vi que me besaba de vuelta sabía que iba a ser mía esa noche, afortunadamente hacía calor y le dije que era mejor que se quitara la ropa, y así fue, no lo dudo un segundo para desvestirse, la tenía desnuda para mí era casi como si me estuviese pidiendo que me la cogiera.

Y así fue la tuve completamente desnuda en la cama seguía besándola y lentamente bajé mi mano a su vagina para tocarla y me percaté de lo excitada que estaba al sentir como tenia la vagina de mojada, no desaproveche la oportunidad me puse encima de ella le abrí las piernas y la comencé a penetrar lentamente y me encanto verle la cara de placer cuando le metía la verga, se notaba que la quería adentro hacia mucho, era divino sentir lo mojada que estaba por dentro, verla tratando de no gemir y gritar del placer para que no nos escucharan fue bastante excitante y al sentir como se mojaba mas cada vez que se venía me excitaba tanto que decidí venirme al sentir que ya estaba mojadisima.

Lolita se veía bastante inocente al principio, como una chica que no habla de temas sucios pero nada más le duro hasta ese ...