DESCUBRIENDO GUSTOS NUEVOS CON EL CULO
Fecha: 27/08/2019,
Categorías:
Gays
Tus Relatos
Autor: ANITO, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
Mi nombre es Raúl, tengo 25 años, soy especialista en planos de ingeniería civil, trabajo para una empresa constructora, por lo general siempre estoy solo y tengo pocas amistades. Desde niño siempre fui retraído y no me gustaba ir a fiestas o reuniones sociales, Cuando ingrese a la universidad escogí una profesión en donde no se participe mucho en grupo, y ahora trabajo en una oficina yo solo, y mi jefe es un gerente de unos 40 años. No me gustaban las mujeres y me agradaba mirar de reojo las braguetas de los pantalones masculinos; imaginándome el tamaño de su verga, su grosor o su sabor, nunca di un paso para dar a conocer estas emociones, en el trabajo me concebían como un sobrado o un autista; mejor para mí.
Un día, mi jefe Carlos; se acerca y me dice: Raúl te invito un fin de semana a mi granja en la sierra, estaremos tres días feriados…. YO: No se, tengo algunas cosas que hacer. Carlos: No seas así, tú me caes bien y contigo la voy a pasar muy contento… que dices. Yo: Bueno, pero no me exijas mucho…si? Carlos: está bien, nos vamos el jueves saliendo del trabajo. Pasaron los días hasta que llego el día citado, yo guarde ropa de campo, y tenía mucho temor de mis expresiones o de lo que pueda pasar allá. Carlos: Okey, vamos en mi carro, trajiste tus cosas o vamos a tu departamento? Yo: si las he traído. Carlos: Vamos pues. Ya en el carro él conversaba muchos temas, yo solo le seguía la ruta, de reojo note que el miraba mi bragueta; yo me atemoricé…. Yo: falta mucho ...
... todavía? Carlos: No, 10 minutos mas y estaremos durmiendo en la granja, vamos a compartir la misma habitación. Yo: si, está bien. Y así fue llegamos rápido y ya en la granja salieron sus empleados, tenia corrales de gallinas, una caballería y los campesinos eran muy amables, la mayoría eran mayores de edad, solo había uno solo un poco extraño, era joven y muy desordenado en su vestir, pantalones anchos y muy holgados, de hablar muy parco, casi como yo; su apodo era “burro”.
Porque le llaman burro, pregunté; Carlos: mañana lo veras cuando vayamos a visitar la laguna de los patos. Yo: que pasa allí? Carlos: todos los obreros se bañan desnudos junto con los caballos, burros y patos, se divierten mucho. Al cambiarme note que se detenía a mirarme las nalgas, por el espejo yo le miraba su verga, él se sobaba los huevos, a mi me picaba el ojete. La tenía regular. Yo esa noche casi no dormí, pensando que hacia allí, pero ya estaba hecho; muy temprano la luz del día nos despertó, fuimos a desayunar, y al terminar a conocer las instalaciones, habían muchos animales, Carlos disfrutaba de sus propiedades, hasta que llegamos a la laguna, ya era mediodía y hacía calor, todos los hombres estaban desnudos en el agua, cuando de repente Yo: Ohhhhhhh que es eso?.... era el peón silencioso, tenía una pinga enorme que en estado flácido le llegaba hasta los muslos, parada como seria, me imaginé muchas chupadas, digo cosas… hasta que Carlos me saco de ese ensimismamiento. Carlos: ves ahora ...