Mi sobrina Katherine y el placer que nos dimos. - Relatos Eróticos

Mi sobrina Katherine y el placer que nos dimos.

... coqueta mente vi que se puso en su cuellos, pechos, ingle y trasero, todo ese aroma lo tengo hasta ahora en mis papilas gustativas, le di la lencería y se la puso, se pintó los labios, era una diosa, aparentaba ser mayor y aprendió algunas poses de mujer madura, me estaba engañando no parecia que tenia ya 14, mide 1.75 casi de mi tamaño y sus senos de tanto manoseo en los días previos le habían crecido los veía más redondos y atrevidos, lascivos a mi vista, perniciosos y a la vez cálidos. Ya teníamos casi 40 minutos de eterna refriega de caricias bucogenitales ella no podía más y subió sobre mi pecho me puso su vaginita en mi cara y me.pidio que la haga mujer, procedi con cuidado, ella me colocó muy candidamente el condón con olor de fresa, jamás lo olvidaré, acto seguido despliegue de fuerzas hacia su bella humanidad, era una mujer soñada por mi, la había preparado y ahora ella sentía que era su hombre totalmente entregada boca abajo y subiendo levemente sus caderas quizo que la atravesara desde atrás y empuje poco a.poco, sentía caliente su abertura, húmeda y coqueta aún con su hilo dental negro que le había conseguido, solo retire hacia un costado aquella lencería e inicie mi labor de macho y protector la atravesé una y otra vez, estaba emocionado y hasta llegué a llorar de placer con ella, fue bello mi pene quería reventar dentro explosionar con litros de semen caliente y bañarla si era necesario me sentía su hombre, jadeando me pidió que le diga que la amaba, se lo dije ...

... y se lo grite en mi cuarto a solas ambos entregados , bombeaba duro, una y otra vez, ella perdía ya la razón, estaba poseída era una mujer desbordada, aprendió mucho ya estaba graduada, me saco el condón le dije que no lo haga, me dijo que ya no podía más, quería mi leche en su cuerpo quería saborearla como antes ya lo había hecho, enfile con mi mano mi miembro y descargué la leche en su cuerpito aún temblando y húmedo por el éxtasis que había vivido, la habla hecho mía por fin, por sus nalgas, pecho y rostro corría emanaciones de amor en líquido seminal caliente, hirviente, indiscriminadamente la labor aún no concluía, teníamos que hacerlo como se debe, quiero ser completamente tuya me dijo, quiero que me lo hagas por mi culito, ella tenía un bello trasero, desarrollador, me tenia loco cuando se ponía las lycra llegando de su clase de baile, un día dejo una colgada en el baño y no aguante la olí de arriba abajo me masturbe y le deje mi leche en su lycra no se que pensaba pero era necesario su olor era de sexo, me perturbada, sus nalgas eran una perita perfecta, enfilada, bien curveadas, redondita, muchas veces la planteaba y asentía, le gustaba que pasara mis manos, se sentaba sobre mi, sentía mi pene erectarse y se movía, me tenía al borde de la locura ya, bueno terminaré mi relato con ma parte más sabrosa, me entrego su anito,  lo besé antes , le puse un poco de vaselina perfumada y de a pocos fui empujando primero movimientos pausados luego fuertes, sentía hasta su hígado ...