Suscriptor suscrito - Relatos Eróticos

Suscriptor suscrito

Una tranquila tarde de Otoño a la hora de onces Interrumpen mi soledad un llamado a mi puerta, tras ella un señor, joven y muy apuesto y en un saludo muy cordial me invita a conocer sobre servicio de Internet, cable y telefonía de su Empresa, como tenia cierta dulzura en su rostro lo hice pasar, aunque le advertí que ya tenía ese servicio le quería conocer su oferta; la verdad es que solo quería  coquetear con el un rato. Su acpecto varonil, pero con cierta inocencia inocencia me cautiva en los hombres. Me contó de las ventajas de su compañía, de los sitios a los cuales podría acceder, etc. Cada momento me entusiasmaba más su actitud y su interés por convencerme hasta que le afirme que en realidad no me interesaba, cambiarme, insistió en los canales para adultos y le pedí me comentara de ellos... Bueno me comentó, esos canales son muy audaces y podrían disfrutarlos con su esposa, ayuda a mantener el interés, bueno le dije conversemos de ello, para comenzar te cuento que no hay esposa en esta casa, vivo felizmente solo y no necesito de esas cosas para tener sexo, me sirven mas cuando estoy solo le dije riéndome; me acompañas con un café?? pregunte, no es que... Dijo, y respondí, mira que comenzó a llover muy fuerte y te vas a enfermar si te mojas!! O te esperan en casa??, no dijo, mi mujer es enfermera y hoy debe hacer doble turno, llega casi a al amanecer de mañana. Que bueno!! Dije entusiasmado!!, perdón le dije, pero pensé que podriamos compartir un rato más... Sí me dijo, ...

... acepto el café, bueno le dije, entonces ponte mas cómodo y olvidemosno un poco del trabajo traje el café con cosas para hacer sandwich, creo que ya es hora de las onces y Feliz de compartir con un joven trabajador y muy atractivo dije coqueteando, sonrió como avergonzado, disculpa si te molesté, es que me resulta incómodo que ud me diga eso, que? Pregunte, eso de lo atractivo, dijo él. Si le dije la gente está muy acostumbrada a reprimir sus sentimientos, emociones e inquietudes por el que dirán, si fuéramos más auténticos nos podríamos entender mejor los seres humanos. Sobre todos los hombres, nos enseñan a no llorar, a ser más rudos, no sentir lo que solo deben sentir las mujeres, en fin muchas cosas y jamás admitir lo atractivo de otro hombre diciendoselo. Si me dijo, en verdad uno se debe reprimir muchas cosas, sobre todo casado, no puede demostrar debilidad, a veces uno tiene ganas de llorar, pero la mujer no lo entendería y por eso uno no se atreve, y a un compañero de trabajo solo te aconseja ir a tomar tragos llegar borrachos para olvidar los problemas, dijo como angustiado, así es le dije, poniendo una mano en su muslo mientras le contestaba y mirándolo a sus ojos hasta que se produjo un silencio y bajó su mirada y sin sacar mi mano le dije que se prepara un sandwich , se notaba delgado, cuando se sacó su chaqueta, su pantalón no moldeaban un trasero exuberante, pero era el tipo de hombre que me gustaba, con el que no podía pasar nada, o pasar a medias o todo. Fue él ...