Las Aventuras de mi Hermana con los Perros del Barrio. 2 - Relatos Eróticos

Las Aventuras de mi Hermana con los Perros del Barrio. 2

... repegandose cada vez mas y mas contra las suaves y firmes nalgas de Almita, hasta que tras muchas estocadas de Berga, el perro se quedo quieto, se le veían sus enormes y cargados huevos como pulsaban y soltaban gran cantidad de mecos dentro del pequeño útero de Almita, que sin poder evitarlo, recibía dentro del mismo grandes cantidades de leche perruna que, estando ella en sus días fértiles y los espermas del perro bien maduros, no habría duda que con esa cantidad de semen recido dentro de mi hermana, esta quedaría irremediablente preñada por su perro macho que reclamaba con esta gran cogida a mi hermana como su hembra perra personal. 
Almita aun desmayatada por la gruesa y larga Berga del perro, seguía recibiendo dentro de ella, chorro tras chorro de fértiles y maduros mecos, que debido a la gran cantidad de los mismos y por la presión que ejercían dentro de su pequeña cavidad uterina, estos poco a poco fueron penetrando por los conductos ováricos hasta llegar directo a los Ovarios donde estaban los ovulos ya maduros y listos para ser fecundados, dichos mecos al rodear al ovulo maduro, procedieron a buscar la parte mas débil del mismo, tratando cada uno de los miles de espermas que el perro arrojo con sus mecos dentro de útero de Almita, entrar en el. El Ovulo estaba protegido y estos buscaban la manera de penetrar la delgada membrana que protegia al Ovulo de los espermas invasores y asi evitar quedar fertilizado por aquellos fuertes y fértiles espermas perrunos que ...

... querían embarazar a Almita, mientras que esto sucedia dentro del útero de Alma, el enorme perro busco la posición mas comoda para el y pasando una de sus patas traseras por encima de las aterciopeladas y duras nalguitas de Almita, quedo culo con culo con Alma. (Dentro de su desmayo, inconcientemente Almita pensaba)…… (Estamos unidos por su garrote enorme, anclados por su enorme  y durísima bola y mis pequeños labios vaginales aprisionan fuertemente sus  grandes partes genitales. Puedo sentir como su verga palpita en el interior de mi pequeño útero en mi interior, siiiii, vertiendo en cada pulsación un gran y espeso chorro más de su fértil  y caliente semen. Ahí me encontraba yo, abotonada al perro callejero y en mi casa, entregando en mi útero sus fértiles mecos tratando a toda costa de embarazarme, de preñarme como a una mas de sus perras. El insiste en tironearse para zafarse y yo no quiero, aprieto mis pequeños labios vaginales, lo retengo, lo pego contra mis ya inchados labios vaginales, lo repego a mi cuerpo que no termina de gozar a pleno, su grande Berga que parece fierro candente, parece mas hinchado, mas grande cada vez que el tironea de mi, mi panocha aprieta involuntariamente como no permitiendo la salida de esa Berga que me proporciona un placer inimaginale…  sentía que su verga era más grande cada vez sentí algo de dolor, pero si muy rico mi vagina estaba hasta el máximo de extendida, quedé pegada a él y colgada, si colgada en su verga!!! Jadeaba de placer me imaginaba ...