En el bus - Relatos Eróticos

En el bus

... las succionó y se las metió a la boca luego se puso a lamerlas y comenzó a subir despacio por el tronco grueso y venudo mientras se la pasaba a la pija por la cara, por toda la cara con una devoción infernal y sacando la lenguita le daba golpecitos con la cabeza brillante e hinchada de mi verga. Comenzó besando la punta de la cabeza, dandole un beso suave, y luego se la metió entera hasta el fondo, me encantaba sentir como sus labios rozaban mi verga al ir entrando lentamente ensuciando boca y en ese entonces agarré y con violencia trayendola hacia mí por la nuca, la hice tragar hasta el fondo, y no la solté hasta que no le chorreó la baba por los costados entonces respiró profundo tratando de recuperarse y me sonrió con lágrimas en los ojos y la baba cayendo de la boca y comenzó a chuparla de nuevo y me miraba con una carita angelical mientras lo hacia con una pasión de puta. Cuando terminé la llené de leche, y se tragó toda, me la succionó para cerciorarse de que no había dejado nada para desperdiciar y yo estaba extasiado al verla sentada sobre sus piernas abiertas y apoyadas en el suelo con la pollera subida y su tanga empapada de jugos vaginales por excitación, con los ojos llorosos tanto chupar pija y sacando la lenguita y pasandosela por la boca para no desperdiciar nada. Sin dudas fue la mamada más hermoso de mi vida