LA VIDA DA MUCHAS VUELTAS - Relatos Eróticos

LA VIDA DA MUCHAS VUELTAS

... y aunque nosotros no podíamos ver nada si fue fácil intuir que los 10 hombres abusaron a Norelys   no solo por los gritos, sino por el vaivén del furgón cada vez que se subía, el movimiento del furgón delataba el ritmo de la penetración y su duración, unos solo fue segundos otros minutos pero todos tuvieron su rato con Norelys que para el final ni se escuchaban los gritos solo las arengas de los hombres que felices con la situación celebraban como si hubieran ganado la lotería.
 Al terminar el comandante sínicamente se dirigió a todos diciendo; “Se pueden ir”  y pronto Don Mario se subió al camión y el resto nos subimos al furgón al fondo observo a Norelys que acongojada, aturdida trataba de vestirse pero aparentemente le había roto parte de sus ropas por lo que pronto algunas mujeres le pasaron una camiseta esqueleto y a su vez la consolaban, mientras el camión comenzaba su marcha con rapidez pero unos Kilómetros adelante, Norelys volviendo a la realidad pregunto por su marido increíblemente lo habíamos olvidado en el sitio de la retención inconsciente y por supuesto ni Don Mario, ni la mayoría estábamos dispuestos a exponernos a devolvernos. Por lo que Norelys  entro en histeria exigiendo que la dejáramos ir por sus esposo lo cual nos vimos obligados a detenernos y aunque trataron de convencerla ella muy alterada se bajó del camión por lo que alguien dijo; “Alguien que la acompañe a esa pobre mujer” lo que hizo que inconscientemente me bajara y me ofreciera a ...

... acompañarla,  alguien me dio tan solo una botella de agua y corrí para alcanzar a Norelys al llegar a ella le dije: “Norelys calma voy acompañarla” ella solo me dijo: “Gracias”.
Caminando hacia el sitio, dos horas después llegamos era fácil de reconocer porque fue antes de llegar a un puente  donde había claro  y allí se encontraba cosas regadas del equipaje de algunos  y las huellas del camión donde se parqueo,  por lo que le indique a Norelys; “Es aquí Norelys” ella miraba y buscaba por todo lado, pero ni rastro de su esposo y se atacó llorar. Para ese momento yo era el asustado, sabía que era mejor irnos pronto por lo que trate de tranquilizarla diciendo; “Norelys cálmense seguro él se despertó y siguió su camino más adelante seguro lo encontramos pero es mejor irnos ya!” afortunadamente Norelys acepto. 
 Seguimos el camino sin embargo Norelys no pronunciaba palabra en el trayecto solo la veía llorar de vez en cuando lo cual me daba algo de pesar, pero entendía su situación por lo que guardaba silencio, pero a la luz de la mañana me deslumbre  mirando  sus atributos físicos eran un manjar, por lo que me deleite morbosiandola mientras Norelys caminaba callada, le miraba su cola que perfectamente redonda pero sus pechos prominentes eran alucinantes y es que la camiseta que le había dado un esqueleto blanco con cuello en U, permitía admirar claramente el tamaño de sus pechos y que aun tenia brasier  uno blanco por cierto, dicha concentración en Norelys fue interrumpida por ella misma ...