Café bar, Bío.
Fecha: 22/02/2020,
Categorías:
Gays
Tus Relatos
Autor: Danisampedro91, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... sodomizarte.
Así maricón, así, relájate y entrégate. Entrégame tu culito y deja que te lo sodomice, ya verás como vas a disfrutar y gozar esta noche.
Sin prisas, pero sin pausa, su polla entraba y salía de mi culo muy lentamente, mientras con su boca mordía y lamía mi nuca y hombro.
Notaba como sus bellos púbicos rozaban mi culo, las pelotas chocaban con la entrada a mi ano, y su polla se deslizaba por mi interior haciéndome sentir lleno y gozar con su deslizamiento mientras me cabalgaba tumbado sobre su cama. Me tenía totalmente entregado y a su entera disposición.
Solo se escuchaba la radio, los jadeos que dábamos al respirar, y el chof, chof, chof chof, de su polla entrando en mi culo.
Me estuvo cabalgando el culo, montado sobre mí, un largo tiempo. Mi culito ya se abría sin oponer ninguna resistencia, dejando que la polla que me estaba follando, entrara y saliera deslizándose por mi interior, sin impedimento alguno. Cada vez que me enterraba la polla en lo más hondo, me hacía sentir un placer que me recorría toda la espina dorsal, haciéndome gemir cada vez que me clavaba su polla en lo más hondo de mi culito.
Casi al mismo tiempo que el empezaba a gruñir y me anunciaba su eyaculación, empezaba yo a notar como por mi polla subía una agradable sensación de placer, que venía de mis huevos y culo. Fue subiendo esa sensación de placer, hasta que note como mi polla se hinchaba y empezaba a escupir todo el semen que tenía acumulado en mis ...
... huevos.
¡Ohhh! Gemí empezando a correrme, ¡ooohhh! ¡ohhh! ¡ooohhh! Suspiraba mientras mi polla iba expulsando el semen sobre las sábanas de la cama, a la vez que mi culito era inundado con el esperma del viejo Bío.
¡Ohhh maricón que gusto! ¡ohhh que gusto! ¡ohhh que gusto!¡ooohhh que gusto! Gritaba mientras me llenaba el culo con su leche.
Una vez terminó de eyacular dentro de mí, dejándome su esperma en lo más hondo de mis entrañas, se quedó tumbado sobre mi espalda, mordiéndome la nuca y hombro, hasta que hubo descargado por completo todo su semen y normalizó la respiración.
Una vez se hubo recuperado y su polla ya había salido de mi culito, se dejó caer en la cama, quedando boca arriba y pegado a mi costado.
¡Dios maricón! Que follada, me has hecho correr como nunca. Menudo culito que tienes hijo puta, me decía acariciándome el culo con su mano a la vez que me besaba la espalda.
¿Quieres quedarte a dormir conmigo, o prefieres marcharte? Aunque te quedes, hoy ya no te puedo follar más, si quieres que te vuelva a follar, será mañana por la noche si tú quieres. Vienes por el bar como hiciste hoy, y al cierre te vuelvo a follar. Este culito que tienes va a acabar conmigo, me vuelve loco tu culito, cabroncete.
¿Qué hora es ya? Le pregunté.
Van a dar las 3 y cuarto de la madrugada, me contestó.
Entonces mejor me voy, le dije. Mañana ya nos veremos en el bar.
Me levanté de la cama, empezando a vestirme. Buscaba el slip por todas ...