Los masajes a mi madrina Karen - Relatos Eróticos

Los masajes a mi madrina Karen

Cuando cumplí los 10 años mi madre le dijo a su mejor amiga Karen si podía ser mi madrina de primera comunión, ellas se conocían desde que eran muy jóvenes así que ella aceptó de muy buena gana, desde ese momento ella venía más seguido a la casa a vernos y salíamos a pasear etc. Mi padre se fue con otra mujer abandonandonos a mi mamá y a mí, solo cumplía apenas con lo que le exigía la ley depositando en el banco no venia para nada a casa. 

Mi madre tuvo que trabajar más horas para poder cumplir con los gastos de la casa llegando más tarde, entonces  cuando regresaba del colegio iba a la casa de mi madrina para almorzar y estar ahí hasta que llegue mi mamá y ess fue nuestra rutina para los tres, mi madrina Karen tampoco tuvo suerte en el amor porque luego de estar con novio años finalmente la dejó.

Ya tenía 15 años y estaba con todas las hormonas alborotadas por la edad teniendo erecciones muy seguidas al verla a mi madrina cuando usaba en su casa short o lycras pero siempre cuidando de no ser visto por ella.

Ella es ...

... enfermera y trabaja en horario nocturno algunas veces sufre de dolor de espalda y cuello por su trabajo así que me ofrecí para darle masajes al verla intentando hacérselo ella misma en su cuello con sus manos que me enseñe como hacerlos, luego de estar atento a sus instrucciones tenía idea que hacer con mis manos.

Mis manos tocaron su cuello y luego sus hombros y parecía que lo estaba haciendo bien porque sentía como se iba relajando y cerraba los ojos y no pude evitar tener una buena ereccion al instante al sentir la suavidad y calor de su piel y le preguntó para tener la seguridad si lo hacía bien.

-! Sii.. qué rico se siente.. hum... tienes talento para los masajes Brunito.. y no te detengas sigue así.. hum.. ¡

En la posición en la que estaba podía ver muy bien la canaleta que formaba sus senos y ver como sus pezones se iban poniendo duros notándose bajo de la delgads tela de su blusa me encontraba a cien del caliente y con cuidado pegué mi ereccion en su espalda normal sabiendo como iría a reaccionar.



(continuará...)