SECRETOS DE FAMILIA: Con mamá en el cine - Relatos Eróticos

SECRETOS DE FAMILIA: Con mamá en el cine

... continuación.
El hombre sentó a mamá sobre sus piernas dándole la espalda y le introdujo el cipote hasta los mismísimos huevos. Mamá empezó a cabalgar como una posesa, quería sentir aquel miembro duro y enorme bien adentro. El desconocido le tocaba las tetas con una mano y con la otra le tapaba la boca para ahogar sus gemidos de placer para que yo y el escaso público que los rodeaba nos percatáramos de lo que allí estaba ocurriendo. Casi al tiempo se corrieron ambos como animales. Mamá sintió las ráfagas de leche caliente y abundante en sus entrañas mientras apoyaba extenuada la cabeza en el respaldo del asiento que tenía delante, a un metro de donde estaba yo. Gritó de placer como la puta que era pero sus gemidos fueron apagados por una batalla entre indios y vaqueros que se desarrollaba en aquel momento en la pantalla. Cuando pudo, se recompuso, limpió con sus bragas los restos de lefada de su concha y las guardó en el bolso. Al poco el hombre desapareció en la oscuridad.
- Me ha gustado mucho la peli - me dijo la desvergonzada a la salida -. Tenemos que venir con más frecuencia al cine, amorcito.
Aquella noche, en el cuarto de baño de casa, rebusqué en la cesta de la ropa sucia las pantaletas de mamá. El olor a concha y a semen me pusieron a mil. Me hice no sé cuántas pajas limpiándome con ellas la escasa leche de mis doce años. Había descubierto lo puta que era mi madre... ¡y aquello me gustaba!