Mi primito me iso una paja - Relatos Eróticos

Mi primito me iso una paja

Hi! Esto fue algo que me pasó ya hace un par de días y la verdad quiero contarlo a alguien ya que fue algo completamente inesperado.

Soy un chico de 17 años, alto, delgado, y bastante simpático para muchas personas, lamentablemente no tengo pareja actualmente.

[CI] Un lunes por la tarde me encontraba en mi habitación jugando tranquilamente en la consola cuando escuché a algunas personas entrar a la casa el cual eran mi tía y mi primito Matías. No ise mucho caso ya que normalmente se quedan a platicar con mi hermana y madre todo el día. Mientras me encontraba jugando me calenté poniéndose mi pene duro hasta mas no poder, yo como buen hombre no podía dejarlo así, entonces puse pausa al juego y me levante a entrecerrar la puerta de mi habitación (nunca la Cierro por completo ya que mi madre siempre cuando cierro la puerta piensa que estoy haciendo algo malo).

Entonces comenze a jalarmela tranquilamente en mi sofá por un par de minutos, me encontraba demasiado metido en el placer que no me di cuenta cuando mi primito entró a la habitación, entonces de pronto escucho una voz a lado mía "Que estas haciendo?". Mi corazón se detuvo de golpe como su hubiera visto un fantasma para lo que rápidamente reaccione cubriendome con las manos y voltear a verle para solo decirle "Nada nada".

El me miró por unos segundos para ...

... después de eso decirme "Qué es eso?". En ese momento no sabía cómo reaccionar y pues me parecía cruel decirle la verdad a tan temprana edad a lo que le dije "Es un dulce que solo tenemos los hombres" el con curiosidad acerco su mano y sujeto con su pequeña mano mi enorme pene bastante duro y palpitando para después el mirarme y dar una sonrisa inocente.

Al ver aquel rostro no pude evitar correrme en su manita, aun con el pene erecto el quito su mano y se limpio el semen que había quedado a lo que le dije "No quieres probar el dulce?", el a un principio se negó más después de estarle insistiendo se puso delante mía y sujetando nuevamente con sus manitas mi pene le lamio la punta y siguió lamiendo lentamente.

Eso me puso a mil con ganas de agarrar su cabeza y hacer que me la chupe de una pero tenía en cuenta que aún era un niño así que lo deje ir a su ritmo. 

Al parecer no le había gustado su sabor a lo que solo se dedico a jalarmela hasta correrme otra vez a lo que le dije que ese líquido blanco tal vez supiera mejor y el rápidamente lo tomó y curiosamente me dijo que sabía a Yogurt. 

Después de eso le dije que no le dijera a su madre ni a nadie más. Que solo yo podía darle su dulce. 

Ya van varios días que no a venido a mi casa con mi tía, ahora solo espero pacientemente a que regrese mi maquina de mamadas jeje.