1. Aslan el perro versátil


    Fecha: 02/05/2020, Categorías: Zoofilia Tus Relatos Autor: Steven 99, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... solo se comparaba a la que su madre me había hecho tener momentos antes cuando me olía la entrepierna con ganas de jugar.
    Me dió mucha curiosidad y morbo saber que se sentiría tocarlo, pero me resistí hasta terminar el cepillado, una vez que concluí me iba a retirar, pero mis ganas de sentirlo y mi excitación eran mayores, así que llamé a Aslan el el se acercó de nuevo, lo comencé a acariciar, desde el lomo y poco a poco bajaba hacia esa grande y roja punta que había notado cuando lo cepille, estaba asomándose de su capullo y sin pensarlo mucho comencé a sobarlo, tal como sabía hacer conmigo mismo, eran movimientos firmes y rítmicos, y Aslan al sentirlo primero estuvo quieto pero al sentir que su pene estaba saliendo de aquel prepucio peludo comenzó a hacer los movimientos frenéticos y característicos de un perro al montar a una perra, al instante comenzó a salir líquido de esa roja y venosa verga, mismo que quise probar, pero me limité a solo oler, era suave y estaba muy caliente, entonces lo utilicé para sobar sus grandes bolas, pasando por ellas y hasta llegar a su ano, era un ano muy bien formado, tibio y muy limpio pues la dueña lo había bañado un día antes, comencé a lubricarlo con su propio líquido mientras seguía masturbándolo, y su enorme verga crecía más y más, el estaba encantado y solo movía la cola con emoción, hasta que en un momento sentí como si Aslan me dijera: termina de una vez y házmelo, se sentó sobre el pulgar con el que lo estaba lubricado y sintió un ...
    ... poco de dolor pues chilló y después se quitó, pero mientras una mano lo masturbaba y con la otra lo lubricada y dilataba, el siguió a mi lado, en ese momento introduje el segundo dedo, mi índice empezaba a explorar el ano de Aslan mientras mi otra mano lo estaba ordeñando con mucho ánimo, y pasados 10 minutos le pude meter el tercer y último dedo, mi dedo medio resbalaba fácilmente y su ano se sentía suficientemente dilatado para tenerme adentro, fu entonces que me quite el pantalón y me bajé los bóxers, me puse un condón y ayudado de mi mano que lo había dilatado lo preparé para meter mis 16 centímetros de verga muy dura y caliente a ese ano tan suave, dilatado y dispuesto a seguir.
    Comencé con cuidado pues a pesar de que estaba bien abierto, aún no entraba muy bien por el ancho de mi verga, hice movimientos suaves y calmados y Aslan solo se hacía para atrás, cómo dándome señal de que me quería adentro por completo, seguí con cuidado y lo penetre hasta que había entrado por completo, comencé a moverme un poco más rápido, un mete y saca rítmico similar a cómo lo estaba masturbando, se sentía tan apretado y tan caliente que yo solo podía gemir de placer haciendo mío por fin al hijo más grande de la perra que ya me había cogido tiempo atrás, Aslan me hizo correrme en 15 minutos y pasado ese rato yo comencé a sentirme muy relajado hasta que ambos caímos rendidos al piso del patio, me había hecho venirme tan rápido y tan rico que al acabar solo volteo para lamerse la verga que ...