AVENTURA EN EL ANTRO Y CONOCIENDO A FERNANDO - Relatos Eróticos

AVENTURA EN EL ANTRO Y CONOCIENDO A FERNANDO

Mi relación con Don toño, la mantuve un poco secreta y muy discreta, ya que él estaba teniendo una relación con alguien más, por lo que me pidió mucha discreción y que lo nuestro nadamas era sexo y placer. Por lo que yo puse de mi parte para no provocar problemas. Dentro de lo que cabe, esa relación me ayudo a ser un poco as discreta con mi personalidad y sobre todo a adquirir una cierta madurez, y sobre todo como era una dama en la calle y una puta en la cama. Cuando deje de ver a Don toño, por motivos de la preparatoria, por las tareas que me dejaban, y casi ya no salía a la calle, ya que llegaba muy estresada a la casa. Cuando llego las vacaciones de verano, mi madre me vino con la noticia que Gonzalo le había propuesto matrimonio y que mas o menos en 8 meses se casaban, por lo que me tomo de sorpresa la noticia, y que al momento estaba tan feliz por mi madre, obviamente mi madre desbordaba de felicidad. Unos días después, ellos decidieron hacer una salida por lo que yo me negué en acompañarlos, a lo que tuve la casa sola una semana completa, en cuanto ellos se fueron, llamé a mis amigas para que estuvieran en ausencia de mi madre, hicimos una y mil cosas, hicimos fiesta con algunos del salón, algunos terminaron follando en alguno de los cuartos, eso si cerré con llave el cuarto de mi madre y el mío. Pero lo más sobresaliente de esa semana fue lo que paso cuando fuimos al antro así que fui con 5 amigos más (3 hombres y 3 mujeres). Para la ocasión me puse un conjunto de ...

... lencería negra, enseguida una blusa blanca y una falda con vuelo negra y unas zapatillas negras. Llegue a la entrada del antro, ahí nos juntamos todos y esperamos a que nos dejaran entrar, al poco rato nos dejaron entrar y nos acomodamos en una mesa que para los que van en grupo grande, y que estaba casi al último, llegamos y pedimos unas botellas para poner ambiente, al poco ratito, todos nos paramos a bailar, nos hicimos bola para bailar entre nosotros, uno de mis amigos que se llama Roberto me sostenía de la cintura, y me decía cosas al oído, como lo hermosa que estaba, piropos, de repente me daba besos en la mejilla a lo que yo también le respondía con uno que otro de modo de juego, mientras iba pasando el tiempo, Roberto ya me empezaba decir en el oído cosas muy candentes y que me excitaron en ese momento, que tenía ganas de culearme, estar en su cama toda el día teniendo sexo, hacerme el amor. Cuando vimos que ya la gente se amontonaba mejor nos fuimos a la mesa los demás siguieron bailando ya que ya se les había subido algo, en nuestra mesa casi no se veía ya que bajaron las luces del lugar para poner las que están en la zona de baile, nos sentamos y Roberto me empezó a sobarme la pierna, yo le sobaba su entrepierna y note como se paraba esa verga, después nos empezamos a besar, Roberto me propuso que fuéramos a los baños, así que él fue y le pregunto dónde estaban al amigo que nos hizo el favor de hacernos entrar, pero el enseguida llego y me dijo que tenían un lugares ...