Me cogí al borracho de la cuadra - Relatos Eróticos

Me cogí al borracho de la cuadra

... ya todos se fueron, hasta tú amigo
Yo: aún borracho, déjeme dormir media hora más por fa
Don Pachuco: claro joven pero póngase cómodo
Entre mis sueños recuerdo como Don Pachuco me ayudo a quitarme los zapatos y el cinturón
Don Pachuco: hágase hacia allá que vamos a compartir cama
Después de media hora desperté para mi sorpresa estaba completamente desnudo con la cara de Don Pachuco muy cerca de mi verga que por alguna razón estaba semierecta, como aún seguía algo ebrio en vez de enojarme, me comencé a calentar hasta que se me paro mi verga, me mide 17 cm aunque lo que me falta de larga lo tengo de gruesa y cabezona, estaba tan caliente que comencé a untarle la verga en sus labios a Don Pachuco este seguía dormido así que decidí pajearme con el fin de venirme en su boca, no me percaté que estaba haciendo ruido y movía la cama cuando de pronto escucho
Don Pachuco: Joven le pongo un poco de saliva
Me quedé bien sorprendido, lo mire y no pude decirle nada
Don Pachuco: tranquilo no eres el primero  al que se la chupo, tú amigo siempre venía a que lo invite, se ponía ebrio y después pasaba a cogerme.
 Apenas termino de decirme esas palabras, se metió mi verga en su boca, los años no pasan en vano Don Pachuco es un buen mamador se la comía toda, me chupaba la cabeza y bajaba hasta mis bolas se las metía una por una, lo tome de la ...

... cabeza y comencé a cogerle la boca, mientras yo gemia de placer el abría más la boca para que le entrará toda
Don Pachuco: que rica verga tienes, te gusta como te la chupo 
Yo: si me gustaa
Don Pachuco: la has metido antes
Yo: pues aún hombre nunca pero a una vieja si
Don Pachuco: pues yo ya te di placer ahora te toca a ti darme
En ese momento se quitó el pantalón y tenía una tanguita roja eso me prendió aún más, se puso en cuatro
Don Pachuco: ahora si metemela, ve despacito porqué soy sensible
Yo: está bien 
Se la comencé a meter despacito, deje que se acostumbre y comencé a bombearlo, solo se escuchaban sus gemidos y como pedía más, así que lo embesti más fuerte así estuvimos como 10 minutos, cambiamos de posición yo acostado y el arriba de mi podía ver su cara de dolor y de satisfacción a la vez
Yo: ya me voy a correr
Don Pachuco: echamelos en la boca como querias hacerlo
Termine tirandoselos en la boca con un gran gemido de extasis. 
Me quedé recostado en la cama mientras el se limpiaba, me vestí en ese mismo rato ya la borrachera se me había bajado, le pedí que no dijera nada y que lo seguiría visitando cuándo tuviera ganas de beber, me dijo que si que cuando guste que era mi casa, solo volví una vez más con mi amigo y nos la chupo a los dos, de ahí nos enteramos que se lo contó a alguien cercano y ya nunca más volvimos a ir