Mi pequeña groupie personal (parte 3)
Fecha: 01/12/2017,
Categorías:
Jóvenes
Autor: pinkblood, Fuente: RelatosEróticos
... paré frente a ella, tomé el lubricante de mi bolsillo, me eché una cantidad generosa en la verga y a ella superficialmente en su ano. Nunca le metí un dedo, quería sentir su culo abrirse por primera vez para mi.
De espaldas frente a mi, con su culo asomado por la orilla de la cama, le pedí tomarse la piernas para tener un mejor acceso.Puse la punta de mi pene en su ano, la miré a los ojos para preguntarle solo con la mirada si estaba lista.
Sin esperar respuesta, empecé a empujar mi verga en su estrecho y virgen culo, una sensación inolvidable. Ella, por su parte, se retorcía para evitar el dolor y con su mirada me decía que siguiera, respirando agitada por la boca. A medida que entraba iba parando para que se acostumbrara a sentirme.
Empezamos a agarrar ritmo, ya se lo metía sin problemas. Su evidente mezcla de dolor y placer se unía a su confusión y novedad.
Casi a punto de acabar salí de su culo, lo que le causó un nuevo espasmo. Sorprendida y anonadada se arrodilló y me empezó a mamar la verga
La tomé de la mano y le di un beso y una palmada en su nalga. ...
... Nos recostamos en la cama de costado, yo detrás de ella, para poder terminar el trabajo. Con mi brazo alrededor de su cuello puede alcanzar sus pezones, con la otra mano acomodé mi verga en su ano nuevamente. Antes de entrar de nuevo, puse mi boca cerca de su oído para respirarle.
Comencé a empujar y sentir como ella se volvía a retorcer del dolor, pero a la vez empujaba su culo hacia mi, entusiasta. Una vez adentro, con la mano libre le abrí las piernas y comencé a masturbarla. A masturbarla y follarla, fuerte, profundo rápido, una y otra vez.
Más rápido, más fuerte, masturbándola y follándola, ya aguantándome la inminente explosión.
En breve sentí que se venía, sus espasmos se intensificaban, sus tetas se sacudían como gelatina y cerré todo el momento descargando una acabada tremenda dentro de su culo.
Acabamos juntos, rendidos, transpirados.Con cada pulsión de mi verga ella se sacudía nuevamente en un mini orgasmo, mientras yo le mordía el cuello y le apretaba los pezones.
Estuvimos horas tirados desnudos en su cama.Tal vez sabiendo que sería la última vez.