Con el esposo de mi abuela - Relatos Eróticos

Con el esposo de mi abuela

Aun recuerdo como de despertaba a las cinco de la mañana  para acompañar al esposo de mi abuela al rancho y durante el transcurso de esa caminata le hacia de todo.
Soy mexicano me llamo Bruno y puedo decir que desde pequeño supe que me gustaban mucho los hombres, pero sobre todo esos de rancho con su aroma característico y ese par de manos fuertes y rasposas.
Pues todo comenzó cuando mi madre tuvo que dejarnos viviendo con mi abuela aya en el pueblo, supongo que siempre me ha gustado la vida del campo, pero cuando empiezas a crecer y las hormonas reaccionan de forma distinta en tu adolescencia dejas de mirar a las personas y sobre todo a los hombres como lo hacías de peque, eso paso cuando a los doce años me empece a dar cuenta de lo buenote que estaba el esposo de mi abuela, pues aun cuando ella es una mujer mayor se caso con un hombre mucho mas joven, ella tenia 50 años y el 25 cuando se casaron, gua era todo un deleite verlo trabajar, pues así rápidamente les puedo decir que era de esos morenos de fuego, bigote ancho, 178 de altura, piernotas, manotas y una espalda que ¡hay canijo!, Pues bueno, este hombre me traia loquito, hasta que un día, las cosas se fueron dando, pues le surgió la idea de poner una carnicería y necesitaba de alguien que le ayudara cada tercer día, a matar cerdo y eso lo hacia muy temprano en el rancho, pues ni tonto ni perezoso me apunte yo para ayudarlo y fue así que empezó mi ...

... trabajo de "chalan" así se les dice a los ayudantes en Mexico. El primer día estaba super emocionado y con una tremenda erección de pensar que caminaría con el en la oscuridad sin que nadie nos molestara y con la completa libertad de verlo todito. Fue así como escuche que tocaban en mi cuarto ¡Bruno ya vamonos! palabras mágicas me levante como un rayo y salimos con una carretilla, empezamos nuestro recorrido y cuando ya teníamos como 10 minutos de caminata lance la pregunta y ¿cuando usted vivía en la ciudad no tenia novias? -Claro que si y muchas, y ¿En que se fijaba de ellas? , pero no me diga los sentimientos dígame en lo físico, -Pues que tuvieran buenas nachas.
Esa fue la respuesta que encendió todo pues lo que después dijo me dio motivo a lanzarme directo -De hecho si tu fueras vieja te la dejaría ir toda. Era cierto lo que mis oídos escuchaban, rápidamente le conteste -Pero no tengo tantas nalgas como una vieja mire toque. Fue ahí cuando por primera vez sentí sus manos pasar por mis nalgas. No le dio pena por que las toco suavemente y mantuvo su mano durante un rato, fue cuando me di cuenta de que tenia una ereccion tremenda que dejaba notar sobre su pantalo, -Mire como se ha puesto, ¿no le duele? le pregunte , -Un poco, me contesto, ¿Si quiere le sobo un poquito? haber y fue así como toque por primera vez ese hermoso pene que fue mio durante muchos años hasta que termine mi bachillerato (seis años)