1. SOY ENFERMERA, NO PUTA!!!!!! (Parte 1)


    Fecha: 02/12/2017, Categorías: Infidelidad Autor: Mr-Spook, Fuente: SexoSinTabues

    ... podía disfrutar de un buen baño de sol, en eso sonó el teléfono de la casa. Siguiendo el sonido llegué a contestar, era Doña Laura para saber si no había renunciado, le dije que todo lo contrario, que con Don Rolo nos habíamos llevado bien y que ahora estaba tomando su baño de sol, me advirtió que tuviera mucho cuidado con el almuerzo porque babeaba mucho, le dije que no se preocupara, que tenía mucha experiencia y nos despedimos. Al llegar al jardín, estaba ubicada atrás de su silla y pude notar ciertos movimientos de sus manos como si se estuviera masturbando, curiosa busque una ventana por donde yo podía mirarlo pero él a mí no. Con sus dedos artríticos se agarraba la verga y trataba con mucha dificultad de masturbarse, casi tenía que mover todo el torso para logarlo, a pesar de lo patético del cuadro, yo estaba fascinada viendo como esa verga crecía entre sus manos, podía notar su cabeza roja y húmeda, yo apretaba las piernas, ¿qué me estaba pasando?, pero esa verga era como un imán para mis ojos, traté de acariciar mi vagina desnuda pero no me dio tiempo. Don Rolo se acalambró y pude ver extasiada como le salían muchos chorros de semen, era evidente que tenía tiempo sin tener un orgasmo, lo terrible fue que entre tanto espasmo se cayó de la silla, yo presurosa lo fui a levantar, por supuesto estaba desnudo y bañado en su propia leche, con mucha dificultad fui sentando a aquel hombrón en su silla, traje un poco de agua tibia y le limpié toda su zona genital, verme ...
    ... hincada entre sus piernas le ha de haber encantado porque me dedicó una sonrisa babosa que a mí me pareció de una ternura infinita. Llegó la hora del almuerzo, quiso hacerlo en el comedor, traté de ponerle su bata pero me gruñó, yo para evitar problemas lo dejé desnudo, así que llevé la bandeja y le empecé a dar su sopa, tenía razón la señora, bebía muy poco y el resto se le escurría por todo su pecho velludo hasta caer en esa área púbica que me traía absorta, fui a buscar con que limpiarlo y con mucho cuidado le aseaba el pecho y luego los genitales, de tanta limpiadera volvió a tener otra erección, yo debí limpiar de nuevo ese pene que cabeceaba al contacto con mis manos, lo aseaba evitando su mirada, no quería que se diera cuenta que yo también lo estaba disfrutando. No sé en qué momento quiso tomar algo de la bandeja y ésta cayó al suelo haciendo un ruido espantoso, con mucha paciencia fui a buscar con que limpiar aquel tiradero, me tuve que poner en cuatro para alcanzar un tenedor que había caído bajo la mesa, cuando me di vuelta me estaba viendo las nalgas y por el pijaso trasero de mi uniforme seguramente había visto mi sexo desnudo, ¡qué vergüenza!, estaba muy nerviosa pero también muy excitada, tenía a escasos centímetros de mi boca, su verga ¡Que tentación, Dios mío! Salí presurosa evitando que notara mi nerviosismo y volví a limpiarlo todo, lo dejé en orden, por la tarde me pidió que lo llevara al yacusi, pero fue imposible porque su cuerpo se resbalaba sin voluntad, le ...