mi sexo loco - Relatos Eróticos

mi sexo loco

Cuentos de la mariposa
mi sexo loco.

Mi sexualidad no me deja en paz. Soy una mujer adulta estoy pisando los cincuenta. Mis hijos ya son adolescentes grandes, viven solos.- Estoy separada hace años.- Trabajo casi todos los días ocho horas.  Los días que puedo voy al teatro, al cine, también me gusta caminar bajo la lluvia.- Pero tengo un problema que no he podido resolver. Soy muy fogosa sexualmente. Muchas veces me auto complazco, pero me gusta hacer el amor con otro ser, hombre o mujer.
El otro día fui a la casa de un viejo conocido.  Es mayor que yo.  Tenemos una relación de muchos años. Estábamos en su casa conversando sobre un proyecto en común, cuando me pareció que me miraba con atención los senos.
Eso no me molestó. Tal vez sin razonar me gustó.
Luego lo observé que miraba mis piernas, que sobresalían de las polleras.
Me puse un poco caliente.  Pero no lo estaba imaginando.
Se puso de pie, continuo hablando mientras caminaba, se acercó a la silla que yo estaba sentada, ahí levanté la cabeza, quedaron mis labios en mástil, y  sin aviso me besó.
Yo lo estaba esperando.
Correspondí su caricia. Como estábamos en un living con ...

... ventanas a la calle, me tomó de la mano, fuimos a otra habitación interior donde desembocaba una escalera de mármol que te llevaba a la planta superior.
En ese espacio me colocó contra la pared, me besó con intensidad, acepté los besos, sus manos bajaron hasta mis pechos, me los estrujo, luego me acarició las piernas levantando algo la tela de la pollera , perdí todo el tiempo ,  y sentí que mi cuerpo quería más caricias, otra vez se liberó mi libido, me desprendí la blusa, las tetas quedaron casi afuera del sostén, me las besó, era bueno, mi mano fue hacia su bragueta, se la desprendí corriendo el cierre del pantalón, busqué la verga que estaba alta y dura, la saqué , me hinqué , comencé a chuparla allí , al final de la escalera, se sentó en el último escalón , levanté mi pollera, me quité la braga, abrí las piernas,  y lo monté , lo cogí, enseguida llegaron los orgasmos, múltiples, esos que les contaba al principio, que no me dejan pensar ,  quiero coger  quiero gozar, no me importa con quién. Ahora mi amigo se transformó en otro amante, que cada semana nos encontramos en un Hotel y cogemos toda la tarde. 
Me dice soy buena cogedora. Mariposa.-