El verano mas caliente - Relatos Eróticos

El verano mas caliente

Esto me ocurrio a principios del verano del 96, por motivos de trabajo un compañero y yo tuvimos que ir a enseñar productos de nuestra empresa al domicilio de un cliente que no conociamos.Cuando llegamos nuestra clienta era una mujer de unos 38 años, morena y con los ojos azules, y a la que pese a su vestuario discreto se le intuían unas formas impresionantes, especialmente sus pechos, y a la que llamaré Marta.Tras realizar las gestiones y hablar de otras cosas vanales nos despedimos, diciendonos que ya nos llamaría si le surgían dudas.A nuestra llegada a la oficina nuestra secretaria nos dijo que había llamado Marta preguntando por mí y que por favor la llamara, a mi compañero se le escapo una sonrisa y me dijo " ten cuidado que esta tía te quiere follar", yo no le hice caso. La llame y me pregunto si podiamos quedar para cenar que tenía alguna pregunta, a lo que por supuesto acepté quedando en recogerla en su domicilio.A la hora convenida pase a buscarla y nada más verla mi polla empezó a levantarse, vestía un pantalon blanco muy fino que le marcaba sus maravilosas nalgas en las que yo antes no había caido, y una blusa tambien blanca desabrochada hasta el inicio de sus pechos.Durante la cena hablamos de cosas del trabajo y sobre nuestros gustos personales, sin que yo no dejara de intentar ver más de sus pechos, la acomañe a su casa y me pregunto si quería subir a buscar los cd´s de musica que me gustaban, asi que subi creyendo que hay se acababa la velada.Una vez en el ...

... domicilio me dijo que iba a la habitación a buscar más música que tenia y que mientras tanto yo fuera eligiendo entre los que tenía en el salón.A los pocos minutos oí:-- Esto es lo que querías ver toda la noche ¿no?.Cuando me giré me quedé inmovil, hay estaba Marta con un salto de cama transparente a través del que se le veían unos pezones oscuros y un tanga.-- No te muevas que te lo vas a pasar muy bien.Se acercó a mi y tras ponerse de rodillas me saco la polla que ya estaba como una piedra y comenzó a masturbarme muy despacio, mientras me decía: ¿te gusta? creo que sí. Tras unos minutos le rogué que se la metiera en la boca, pero lo unico que hizo fue sacar la lengua y darme golpecitos en el glande, asi que no aguanté más la levanté y la lleve a la cama.-- Tumabate -me dijo- que ahora si me la voy a tragar entera.-- Sí pero girate que yo te pueda acariciar.Comence a acariciarle esas maravillosas tetas y esos pezones que por momentos se ponían cada vez más duros,oyendo como gemía con mi polladentro de su boca.-- Para, para que vas a hacer que me corra, me gritó cuando lo unico que habia hecho era tocarle las tetas.Ante esto seguí acariciandoselas y empecé a comerle los pezones y morderlos, tras haberle dado la vuelta y haberla tumbado quedando yo encima, notando como se corría y un pequeño reguero salia de su coño y mojaba la sabana.-- Has hecho que me corra, las tetas son mi punto debil y hacen que me corra muy rápido, así que ahora follame fuerte y hasta el fondo.Yo lejos de ...