Mi hijo despertó en mi el deseo y desenfreno moral - Relatos Eróticos

Mi hijo despertó en mi el deseo y desenfreno moral

Soy Ana Brenda, tengo 60 años de edad, ya soy una persona adulta mayor, ni para bien o mal he llevado una vida común como toda gente.

Tengo un hijo, se llama Carlos, tiene 35 años de edad actualmente. 

Nunca ni por equivocación llegué a pensar en mi hijo cómo hombre o algún deseo sexual. Es lo bonito que tengo en la vida.

Había quedado ir de visita al departamento de él un día domingo, así que a las 7 am llegué a su departamento y al ver que no me abrió, saque la llave que me había dado por si algún día lo necesitaba.

Al entrar olia mucho a cigarro y alcohol y el departamento todo un desastre de tiradero, seguramente había tenido fiesta.

Me dirigí hacia su recámara, la puerta abierta y al asomarme lo vi todo dormido en medio de su cama, pero estaba en calzónes, era color blanco y lo que más llamó mi atención y mirada, era el bulto erecto de su verga recostada hacia su pierna izquierda!

No les mentire, pues al verle así, mi vagina se me humedeció, tenia años que mi cuerpo no reaccionaba de esa manera. Sentí mucho morbo, exitacion y deseo. Aún que era mi hijo, en ese momento no lo vi como tal, sino como un hombre.

Me acerqué hacia su cama, le hable por su nombre y no respondió, estaba bien dormido.

No lo pensé más y apoye mi mano en su bulto y comencé a sobarcelo sin sacarlo del calzón.

Era una sensación exitante estar tocando a mi hijo borracho. Con el manoceo vi que le estaba saliendo algo de líquido transparente y había mojado su calzón con ello. Tomé mi celular y le tome la foto a ellas.