MEMORIAS DE UNA PEQUEÑA PRINCESA. - Relatos Eróticos

MEMORIAS DE UNA PEQUEÑA PRINCESA.

... leer.Incluso intentaba jugar con Pompon.Nada me daba resultado.He decidido que lo haré por última vez.Tan sólo una vez más.Me quito toda mi ropa,incluida mi bombachita,me recuesto en mi cama,hundo mis dedos en el pote y desparramo el dulce por mi pecho.Cierro mis ojos.No debo esperar nada.Ya la lengua de Pompon ataca mis tetitas,mis pezóncitos se endurecen de manera increíble y mi conchita late como un corazon desbocado.Mi cuerpo se arquea y no soy dueña de la mano que se estira y llena,groseramente,de dulce sus dedos.Tampoco soy responsable de que esos dedos extiendan,ese dulce,por mi conchita.Pompon no demora en localizarío y allí hunde su hocico y su lengua.Dibujando una y otra vez el recorrido de mis labios.Tiemblo y tirito sin poder controlarme.Siento el retumbar de truenos y vuelvo a la realidad.No son truenos,son,los fuertes,golpes que Matilde está dando en mi puerta.Salto de mi cama y en mi camino hacia la puerta me pongo mi camison.Al abrir,el rostro de Matilde,está desfigurado y con voz entrecortada me pregunta:"!!Paty,estas bien?Porqué gritabas así!!.?Que te hacia Pompon?para que vos gritaras!!ASII.AAAHH,Pompon,asii.Maaas,Pompon!!".Sólo atiné a contestar que me había quedado dormida y,seguramente,había soñado.Me vuelvo a la cama.Estoy confundida y muy asustada.Matilde,con sus 35 años,no inventaria mis gritos.He gritado,y lo he hecho tan fuerte que Matilde me ha escuchado.Conclusión.Debo ser más cuidadosa.Al ir pasando los días,el miedo va disminuyendo y las ganas ...

... aumentando.El dulce ya permanece en mi mesa de noche.2 tardes después me vencen las ganas de volver a sentir esas sensaciones tan ricas.Repito el ritual.Pero esta vez,extiendo poco dulce en mis tetitas y me quedo con mis dedos llenos de dulce.Pompon ya está encima mío, su lengua caliente y húmeda castiga mis tetitas.No aguanto mucho tiempo,necesito sentir que me chupara"allí mi conchita.Paso mis dedos impregnados por mis labios y la lengua de Pompon se dedica con fuerza al dulce.La aspereza de sus lenguetazos hacen subir los gritos a mi garganta,pero mantengo mi boca tapada mordiendo la sábana.Vuelven los temblores,mis piernas abiertas se estiran y recogen convulsionando.Este suceso,lo voy a ir incorporando a mi vida y voy a ir ganando confianza para agregar más placer.Una tarde,ya adicta,a la lengua de Pompon y buscando mas y nuevas sensaciones,me giro y embadurno mi culo con dulce.La lengua me hace aullar mientras va y viene por mi raya.He notado que cuando Pompon se retira mi conchita está toda mojada.También me doy cuenta que mientras me chupa,entre sus piernas traseras aparece,como un lápiz rojo y puntiagudo.Los meses próximos,encerrarme con Pompon,en mi dormitorio será una constante.Si estoy boca arriba mis dientes están cerrados sobre la sábana, si boca abajo,es la almohada la que ayuda a que mis gritos no lleguen a oídos de Matilde.Ha pasado un año.Todos se ríen cuando llamó a Pompon,ha resultado ser un cachorro de SAN BERNARDO, por lo que su tamaño se asemeja más a un ...