Un masaje espectacular - Relatos Eróticos

Un masaje espectacular

Al iniciar esta semana, tenía ganas de  recibir un masaje de parte de mi gran amigo Santiago, un profesional que trabaja en esto, pero en mi caso soy afortunado y su masaje tiene un adicional para mí.
No nos habíamos visto desde hace un par de meses y por obvias razones me sentí muy excitado de volver a sentir sus manos sobre mi cuerpo desnudo.
Le llame por teléfono y me dio la dirección de su nuevo local, ya que sabía se había cambiado, pactamos para estar allí a las 10 am de ayer lunes 3 de agosto, pero llegue como 20 minutos antes, al llegar me invito a pasar y le felicite porque el lugar está mucho más amplio y acogedor, la sala de masajes con su camilla cómoda y amplia, un lugar espacioso y muy acogedor, ya en este lugar me dijo, que es lo que deseas que te haga?, entonces le dije que me gustaría una masaje más centrado en mis piernas y área genital, entonces me desnude y acosté sobre la camilla, Santiago me puso una cobija delgada y antes había encendido el calefactor porque la mañana estaba un poco fría, acto seguido se puso su mandil y puso música ambiental, luego me aplico en el cuello y  detrás del pabellón auditivo, alguna esencia relajante, empezó a darme el masaje en mis pies y piernas, llegando de inmediato a mi área genital sin tocarme aun el pene ni testículos, esto me excito mucho y fue notoria mi reacción, por lo que se dio la oportunidad de centrarse directamente en mi área genital, dejando caer gotas de aceites aromáticos sobre mis testículos y pene ...

... para de inmediato proceder a masajear estos que de inmediato me llevaron a una excitación increíble, que me retorcía de placer sobe la camilla, entonces vi que se puso un guante y al tiempo que dejaba caer aceite sobre mi área cercana a mi orificio anal, para darme masajes en esta área y mi grado de excitación fue extraordinaria, que me empezó a introducir su dedo en mi ano, llenándome de placer, mi excitación se incrementaba y le pedí que me introduzca dos dedos y sentí que el placer era mayor, pero de pronto sentí algo de dolor, entonces me dijo que me estaba introduciendo tres dedos, esto me hacía sentir como que dentro de mi ano estaba un gran pene perforándome literalmente, sus movimientos fueron muy intensos y yo quería que me penetrara pero me dijo que no era posible en este lugar, ya que es de trabajo y que lo que estaba haciendo era muy especial y solo para mí, entonces comencé acariciando su pene sobre el pantalón hasta que logre bajarle y le acariciaba su pene, le pedí que me penetre pero no conseguí convencerle entonces quería tenerle en mi boca pero tampoco, así que al máximo de mi excitación le pedí me haga un masaje prostático, que de inmediato me complació y con gran maestría su dedo me daba un placer inigualable y excitante.
Mientras me perforaba literalmente con sus dedos mi orificio anal, mi pene erecto estaba a punto de estallar, pero trataba de disfrutar y evitando terminar.
Estimo que pasaron como 25 o 30 minutos de exploración anal, ya no podía más y ...