Luego de una rasurada genital - Relatos Eróticos

Luego de una rasurada genital

Me había levantado con el ánimo de pasar un día en casa, quizá leyendo, mirando TV o cualquier situación dentro de casa.
Al ducharme, me di cuenta que mis vellos del área genital habían crecido y era hora de rasurarlos, así que acto seguido atendí esta necesidad, para lo cual aplique espuma de afeitar en el área correspondiente, con mi mano izquierda agarre mi pene que estaba flácido por la cabeza para poder rasurar y empecé con la rutina habitual, desde la cabeza hacia la pelvis, cubriendo cada espacio, luego el área lateral, para continuar por la parte de los testículos y el pene en su parte inferior, antes de continuar por el área del orificio anal, pude sentir la piel sedosa y delicada que había dejado la rasurada, entonces me abrí de piernas para aplicar la espuma en el área del orificio y alrededores, luego continúe con la rasurada y dejando como resultado una piel muy suave que excitaba al tocar, mi orificio anal estaba sin un solo vello y esto es muy delicioso sentir y pasar mi mano por allí, continuando con el proceso de rasurada, termine de ducharme, me seque y luego me aplique una buena cantidad de crema hidratante, para aliviar la rasurada y dejar toda esta área en condiciones muy  confortables, pero al dar el correspondiente masaje, mi pene empezó a ponerse muy duro y me sentí muy excitado, estaba a punto de iniciar una buena masturbación cuando sonó el teléfono, esto me sorprendió y bajo la erección un poco, al contestar, grata sorpresa era  mi amigo Manuel, ...

... que me preguntaba cómo estaba y que estaba haciendo, le comente en lo que me hallaba y como respuesta encontré, por favor no lo hagas, si no tienes inconveniente paso por ti y vamos a un motel, esto me pareció muy interesante y le dije que con mucho gusto, así que me vestí rápidamente y me puse un hilo dental pequeñito de color vino
Manual no tardo más de 10 minutos en llegar  y me embarque en su auto, para salir con dirección a un motel que no está muy distante, al llegar, me cubrí mi cabeza con una chaqueta para que se creyera se trataba de una chica la que ingresaba con Manuel.
Dentro de la habitación, no desperdiciamos ni un segundo, para darnos deliciosos besos y caricias que nos excitaban al máximo, desnudándonos con mucho placer, pero me pidió que me acostara de espaldas sobre la cama  para  tomarme una foto con este hilo que le gusto mucho, esta foto justamente comparto con ustedes mis queridos lectores.
Luego de tomarme la foto, me separo las piernas y con sus dientes procedió a retirarme el hilo, dejando liberado mi pene totalmente erecto, para dar inicio a una mamada deliciosa, mi pene se introducía hasta el fondo y con su mano acariciaba mis testículos, llevándome a una excitación sin límites, que me hizo reaccionar enseguida y girando suavemente mi cuerpo sin sacar mi pene de su boca, me acomode para iniciar un deliciosos 69, donde literalmente nos comíamos mutuamente nuestros deliciosos penes que estaban a punto de explotar, su pene estaba delicioso y quería ...