1. Le di por el culo a mi madre!!


    Fecha: 21/09/2020, Categorías: Incesto Tus Relatos Autor: Antonio, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X


    Que rico le chupaba el culo a mi madre, ella una mujer divorciada, madura, gordita y de un precioso culo enorme disfrutaba no sin cierto pudor el que su propio hijo le comiera el ano, la tenía bien empinada sobre el borde de su cama con las piernas separadas, ella arqueaba la espalda parando más ese voluminoso trasero quejándose de placer mientras mi boca cubriendo ese hueco que se formaba entre sus aguadas nalgas le chupeteaba, succionando su fundillo delicioso, hundía mi lengua lo más profundo dentro de su recto acariciando las paredes rugosas, la palma de mi mano frotaba la cálida y peluda panocha de gruesos y carnosos labios ya húmedos, jugosos disfrutando su sabor, su aroma, sus quejidos y cuál había sido el pretexto?
    Ella estaba en su recamara, de pie doblando su ropa limpia cuando regrese del trabajo, la falda corta y ajustada que usa de uniforme en su trabajo le hace ver bien ricas las nalgas y marcaba perfectamente el pequeño calzoncito que le cubría a media nalga, las piernas desnudas que mostraban ya el paso del tiempo, el paso de los años en su piel se veían preciosas, así mismo sus pies aún calzados con las altas zapatillas que usa a diario, la blusa se le ajustaba y de espaldas se le marcaban esos rollitos de grasa, de carne excedente, las lonjitas!! Me acerque detrás de ella que giro el rostro al escucharme entrar y me saludo sonriente, yo miraba embelesado ese trasero que se me antoja mucho y que cada día me era más difícil no mirarlo, no pensar en el... ...
    ... Hasta ese momento ella no había dado indicios de permitirme algo con ella, tampoco yo había revelado mi secreta y sucia fantasía que tenía con mi madre, es cierto que solía a menudo masturbarme con sus pantaletas sucias, que eyaculaba sobre ellas dejándolas cubiertas de mi espeso y abundante semen, aunque solía lavarlas muy bien después, notaba que al secarse mostraban manchas blancas donde depositaba mi esperma, no sabía si ella lo notaba, si las volvía a lavar o simplemente y aun mejor, así se las ponía sin saber que llevaban la marca de mi semen..
    Pues bien que la abrase, rodeando con mis manos su redondo vientre, bese juguetón sus mejillas y su cuello provocando su risa nerviosa y que la piel se le erizara al momento, claro que al abrazarla y untar mi cuerpo al suyo, ella percibió la dureza de mi verga que ya tenía parada contra sus nalgas porque su mirada de sorpresa, de sobresalto espontáneo me lo dijo, pero no dijo nada solo sonrió apenada, yo le hablaba al oído preguntándole como le había ido en el trabajo y esas cosas, mientras no dejaba de besar sus mejillas, parte de su cuello y mis manos acariciaban amorosas su vientre, pase mis dedos por el borde de su pantaleta que se marcaba bajo su falda y ella se sonrojo tímida, apenada..
    "¿Antonio.. Que tienes amor? Oh estas muy raro, muy...muy cariñoso conmigo.. Ohhhh"
    Ya no podía aguantar mas, se me antojaba mi madre, deseaba a mi madre, quería coger con ella, quería meterle la verga!! Seguro ella echaba de menos un hombre ...
«123»