EL GUSTO QUE ME VEA DESNUDA - Relatos Eróticos

EL GUSTO QUE ME VEA DESNUDA

Me llamo Antonia, tengo 24 años, me considero una mujer linda, mido 1,60cm, mi cabello es ondulado, castaño y corto, mis ojos son color miel, y considero que tengo buenos gustos, un buen trasero y unas piernas gruesas.
Les quiero contar que hace un tiempo atrás me di cuenta que me gusta que me vean desnuda, todo empezó por casualidad... estábamos en la residencia con mi novio y yo me estaba bañando él me pidió que solicitara una bebida, por lo cual salí con la toalla puesta encima de mi cuerpo y no me percaté que al, llegar el dependiente y al abrir la ventanita, note la mirada del muchacho, ya que mi toalla era demasiado pequeña y tapaba mis senos, pero no mi vulva, cuando el fijo la mirada allí, fue que lo noté, de forma bastante natural... al acercarme a la ventanita, tomé la bebida y no cerré la ventana, ya que no sabía qué hacer, por lo que supuse que cuando di la vuelta, el me observó todo mi trasero al desnudo, me quedé helada un instante así, mostrando parte de mi cuerpo, por no saber cómo actuar... me sonrojé y entregué a mi novio la bebida, me fui rápido al baño nuevamente... lo que pasó es que no me molestó que me vieran, sino más bien me gustó recordar la cara del muchacho... tenía una cara de querer mi cuerpo y me gustó sentir ese deseo del muchacho... mi novio igual me lo hizo notar... pero él se rió nada más... pasó un tiempo y se me había olvidado el asunto cuando fuimos a otra residencia, esta vez nos atendió un señor bastante mayor de edad.. bueno, el tema ...

... es que hacía calor, me bañé y mi novio me dijo que si quería tomar algo, lo cual acepté y lo solicité, pero esta vez me acordé de la vez que el muchacho me observó, así que para esperarlo, me desnudé y dejé intencionalmente la ventana medio abierta, pero cuando él llegara, se me viera todo mi cuerpo desnudo y de espalda, mientras mi novio estaba intentando colocar el canal porno,... cuando el señor llegó, yo estaba desnuda y de espalda,... y así fue... el señor llamó, le dije ya voy, me hice la distraída, para que me viera un buen rato mi culo, y cuando voltee a recoger las bebidas, ahí estaba el, señor con sus ojos posados en mis senos primero y después en mi tupida vulva, fue tan intensa y morbosa la mirada, que sentía la respiración agitada de él, me tomé toda la tranquilidad del mundo para tomar las bebidas, además de consultarlo por alguna comida que podrían ellos vender, él contestaba incoherencia y atinó a decirme, que llamará a la recepción que ahí me informaba, pero no habían pasados dos minutos, cuando tocó la ventanita para traerme la lista de alimentos, lista que ya estaba al lado de la cama, como sabía su intención, abrí la ventana y me coloque de frente a leer muy lentamente y en voz un poco alta la lista de alimentos y a preguntarle uno por uno, hasta le pregunté qué tan frío estaban los refrescos, él me dijo que bien helados, a lo cual le contesté, pero que tan helados y le formé a una conversación sobre los grados de helado de los refrescos, él no cambiaba su ...