1. Con doña Mary, la vecina del edificio


    Fecha: 22/12/2017, Categorías: Fantasías Eróticas Autor: Beto140773, Fuente: CuentoRelatos

    Hoy no voy a hablar de mi cuñada Sonia, hoy les platicaré de doña Mary, una vecina del mismo edificio en el que yo vivo, y con la que me he pasado un sinfín de noches y días de sexo extremo.
    
    Bueno, pues resulta que la primera vez que me lie con ella fue por casualidad, normalmente yo solo la saludaba a ella y a su marido que viven solos en su departamento, sus hijas viven en una ciudad cercana y la visitan de vez en cuando, como les contaba fue casualidad, ya que cuando baje al estacionamiento un día que salía de compras (era un sábado al medio día) la mire que estaba sola con el cofre de su auto levantado, buscando cual eran la falla que no le permitía encenderlo, como les digo es una mujer mayor pero muy bien conservada, traía ropa deportiva, unos leggings ajustados que permitían ver las curvas perfectas de su trasero, y una blusa de tirantes bastante escotada y ajustada que hacía que sus preciosas tetas resaltaran tanto que no podía dejar de verla, me acerque para ver si podía ser de utilidad en algo, la verdad se dé mecánica tanto como de astrofísica, o sea nada, pero ver ese cuerpo escultural bien valía la pena de hacer el intento de ayudar.
    
    —Buenas tardes doña Mary como esta que es lo que pasa puedo ayudar —fue lo que le dije.
    
    —la verdad no sé qué le paso al coche, hizo un ruido raro y después solo se apagó y ya no quiso arrancar, no sé qué es lo que tenga, y mi marido salió de la ciudad y no regresa hasta el martes por la mañana, así que ya me quede sin ...
    ... carro todo el fin de semana, no poder salir ni a hacer las compras —me respondió ella.
    
    —bueno la ayudaría pero la verdad no se absolutamente nada de mecánica y no quisiera dañar más su coche, pero como ve si la llevo al supermercado, y a donde usted necesite ir, sin ningún problema.
    
    Ella volteo a verme y me responde:
    
    —claro que no, no quiero causarle molestias, ya veré como me las arreglo yo para hacer mis diligencias no se preocupe.
    
    Yo estaba extasiado viéndola de arriba a abajo, nunca me había tomado el tiempo para observar su belleza, ver esas piernas bien formadas terminando en unas nalgas impresionante mente duras por el ejercicio, y esas tetas con sus pezones invitándome a chuparlas y estrujarlas, su coño se dibujaba perfectamente en la parte frontal de su leggings, y era una verdadera invitación a chuparlo y penetrarlo sin compasión.
    
    —no se preocupe yo estoy libre todo el fin de semana, de hecho iba saliendo para hacer mis compras a el supermercado, con todo el gusto del mundo la puedo llevar a donde usted disponga.
    
    La verdad no se hizo mucho del rogar y nos fuimos al supermercado, hicimos cada quien sus compras, la lleve a la tintorería a dejar unas prendas y a recoger otras, mientras nos transportábamos de un lugar a otro, platicamos de su vida, lo monótona que era por el trabajo de su esposo casi no se veían, ya que él tenía que viajar constantemente, y sus hijas solo la visitan cada 2 o 3 meses, ella va al gimnasio y sale de vez en cuando con alguna ...
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