A los 15 - Relatos Eróticos

A los 15

... entraaaa – me queje entre lágrimas.
	Y se enfadó. Se levantó de un golpe y yo fuí a caer al suelo de espaldas. Y él, de pie, me cogió de los pies abriéndome las piernas y me puso un pie, que me tapó los huevos y la polla, y empezó a presionar.
	 Pensaba que me chafaría los huevos.
	-Por favor, paraaaaa ¿Qué quieres que haga?
	-Cógete las piernas por detrás de las rodillas – Me ordenó con la cara desencajada y la polla a punto de estallar.
Le hice caso enseguida sin pensar que en esa posición, mi culete quedaba totalmente expuesto para su polla.
Cuando colocó su polla en mi ojete, yo solo puede pensar en relajarlo al máximo para que no se enfadara y, entonces, se dejó caer y su polla invadió de un golpe mi culo con la fuerza de todo su peso. Mi boca se abrió como nunca pero no salió ningún grito, ya que el dolor que sentí me bloqueó totalmente y me desmayé. 
Me desperté por el dolor que seguía sintiendo mientras cabalgaba mi culete, entrando y saliendo con una fuerza que en cada embiste creía que me partía. Para entonces ya tenía el culo como adormilado, pero me escocía por dentro como si me estuvieran metiendo brasas.
Si todas las embestidas eran fuertes, ninguna como la última. Creo que me entraron hasta sus huevos y todo. Y empecé a notar un alivio calentito dentro de mi culo. Se estaba corriendo. Y si en mi boca soltó leche, en mi culo soltó el doble, Y como siguió penetrándome, la leche actuó como una crema suavizante que me relajo los ardores que sentía y note ...

... un placer increíble que hizo que me corriera sin tocarme.
Ya no podía más y se quedó quieto encima mío todavía con su polla en mi culo hasta que se fue aflojando y salió ella solita con un plof y seguido de un rio de leche y algunas gotas de sangre y de heces.
-Ven, vamos a limpiar este culito – Dijo mientras me incorporaba y me guiaba a la ducha. Allí, desenroscó la alcachofa de la manguera, me la metió por el culo, que, debido a la follada, entró muy fácilmente y le dio al agua. Casi me vuelvo a correr de la sensación de alivio que sentí al notar el agua invadir mi culo.
Al quitar la manguera de mi culo y, al hacer fuerza, un chorro de agua a presión salió de mi culete lo que me provocó otro orgasmo y una flojera de piernas que me dejo sentado en la ducha.
El conserje sin parar de reir, me ayudo a levantarme, me secó sin dejar de meterme mano por todo el cuerpo, me vistió y, después de darme un beso con lengua, me dijo que ya estábamos en paz.
Él se vistió y salió primero del vestuario y yo me quede un rato sentado en el suelo recuperándome de lo que había vivido.
Así estaba cuando se volvió a abrir la puerta y apareció Jose. Pero antes de que entrara, me pareció oírle hablar con el conserje diciéndole que si le había gustado lo que le había conseguido. Al parecer Jose le traía chicos al conserje. Pero eso lo supe días después.
Ese día Jose entró en el lavabo pidiéndome perdón porque no había podido hacer nada para evitarlo y me dijo que le contara lo que me habían ...