1. Descubrí que un hombre me atraía


    Fecha: 30/12/2017, Categorías: Gays Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    Un obrero negro, delgado y alto entró a trabajar en la fábrica de mi padre y al conocerlo descubrí que me sentía muy atraido por él. Descubrir que me atraía otro hombre despertó mi morbo, y quise conocerlo mejor para ver si pasaba mi calentura, pero mientras más lo conocía más atraido me sentía, tanto que empecé a fantasear con él y a masturbarme imaginandome en sus brazos.
    
    Este hombre era y tenía una conversación interesante. Empecé a invitarlo a tomar algo o a cenar, y un fin de semana lo invité a mi casa de campo, pidiendole al cuidador que se fuera ese viernes a mediodía. Llegamos a las 8 pm y me desnudé completamente para nadar en la piscina, el hizo lo mismo y ví su pene oscuro. Era largo, grueso y me pareció bello. Esa noche me dio un delicioso masaje y no disimulé mi placer, trató de hundir uno de sus dedos en mi ano y gemí diciendole que nunca lo había hecho. Entonces me giró y beso en la boca con gran deseo y muy largamente, moviendo su lengua divinamente en mi boca, entonces se montó a horcajadas sobre mi y colocó su sexo en mi boca. Lo acaricié con deseo y al eyacular me bebí hasta la última gota de su semen.
    
    Entonces empezó a dilatar mi ano deslizando uno de sus dedos, luego de lubricarlo con vaselina. Sus besos en mi ano y glúteos me volvieron loco de deseo, llegó a hundir tres de sus dedos en mi, antes que me abalanzara sobre su virilidad y lo ...
    ... satisfaciera oralmente por segunda vez. Entonces me llevó a la cama en sus brazos, imaginé lo que me haría, pero allí me beso con ternura y deseo largamente restregandose contra mi cuerpo y me dijo: Mañana es mi cumpleaños, quiero que seas mi regalo.
    
    Al amanecer después de desayunar salímos al pueblo más cercano. Allí me compró unos zapatos de tacón, un vestido ajustado, hilos dentales diminutos, gel lubricante, crema de depilación, y maquillaje. Al volver a casa temblaba de anticipación.
    
    Me depiló totalmente, maquilló, pintó mis uñas de pies y manos, y vistió como mujer. Entonces me hizo mirar al espejo mientras se me asentaba por detrás y preguntó: ¿Quieres ser mi mujer?, yo temblaba de deseo y susurré si. Entonces me llevó a la cama y me hizo suyo muy tierna y sutilmente. Al sentir su sexo completamente dentro de mi tuve el más intenso orgasmo de mi vida, a pesar que sentía que mi ano se rasgaría con aquel inmenso pene que alojaba.
    
    Samuel me hizo el amor 7 veces ese día, dejandome agotado y adolorido, luego me hizo vestir como mujer y me llevó al cine del pueblo donde me beso con deseo y lujuria, después fuimos a cenar y noté que otros hombres me miraban y me sentí muy excitado.
    
    Samuel me convirtió en su hembra y ejerce un gran poder sobre mi, no puedo negarme a nada de lo que me pide, a pesar de haber pasado ya más de dos años durmiendo tres noches de semana juntos. 
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