Sexo duro con Liliana, mi madre - Relatos Eróticos

Sexo duro con Liliana, mi madre

... madre.
Si se da, se da. Dejame ver.
Vayan este fin de semana a mi casa de la costa. Tomense un par de días solos. Y ahi nadie los conoce. Seducilo la noche del viernes y no le des el dulce. Así el sábado a la noche estará muy caliente y no podrá resistirse. 
Fuimos a la costa. Llegamos el viernes a la noche y mi madre comenzó a probarse ropa de playa. Venia con una maya y me mostraba para que le diera opinión. Después la cambió por otra mas escotada y me mostraba las tetas. 
Se las agarraba y me decía, que te parece? Los tipos me mirarán o ya soy vieja?
Mi madre empezaba a seducirle y yo me dejaba.
No, mami. Soa hermosa. Te mantener bien. Los hombres querrán conquistar e.
Te parece,dijo 
Desde que me separé de tu padre no tuve sexo.
Oh perdón, tal vez no deba contarte bebé, sos mi hijo.
No mami, esta bien. Ya somos grandes, podemos hablar de ciertas cosas.
Fue así que preparó un café y estuvimos como media hora hablando de sexo: me preguntó que hacia con mis novias, que me gustaba, si había pagado por sexo y todo eso.
La pregunta final fue: tendrías sexo con una mujer de mi edad?
Y por qué no, le respondí.
La cara de mi madre se sonrojó y se puso feliz. Me dio un beso en la nariz y se fue a la habitación.
Que opinas de esto hijo?
Y salió con una bikini que casi lucia en pelotas. La tanga era casi un hilo y se le veía todo el enorme culote de manera brutal.
Quedé congelado.
No veía la hora de tocar ese culo y esas tetas y cogerle con todo a mi ...

... madre.
Hermosa bikini, ma.
La llevaré a la playa mañana.
Nos fuimos a dormir cada uno por su lado.
Me hice una bruta paja.
Al otro día lo que era previsible. Poneme cremita de sol en todo el cuerpo. Y le pasé bronceador por la espalda y los hombros. Las piernas también me dijo. Y palpé sus gambas con mucha calentura. Ella tambien me paseó bronceador por la espalda, las piernas y el pecho. Cuando terminó de hacerlo me dio un beso en la tetilla. Que lindo mi bebé, dijo
Llegó el atardecer y comimos algo ligero en la costa. A la noche volvimos a la casa.
Yo sabia que esa noche se daría la cosa.
Me baño primero dijo mi madre.
Cuando se terminó de duchar me llamó.
Alcanzame la toalla me dijo y se dejo ver desnuda.
Salió y se fue a la habitación.
Me duché yo sabiendo que el plan trazado por mi madre estaba llegando a su punto culminante.
Yo solo me dejaría seducir.
Cerré la ducha. Me sequé y escuché que fuera del baño, en el pasillo, mi madre caminaba con tacos rumbo a la puerta del toilette.
Abrí la puerta como un cofre de la felicidad a sabiendas de que del otro lado me esperaba mi madre lista para incestar.
Mi pija ya estaba totalmente te dura y sobresalía de la toalla.
Moví la manija, la puerta se abrió y zas...como imaginaba.
Mi madre me estaba esperando de frente con una bata de dormir media violeta pero muy transparente. Se le veía todo.
Tenia portaligas y zapatos con tacos. Estaba toda pintada y lucía como una verdadera puta esa noche.
Te estoy esperando bebé, dijo mi ...