Como conocí a mi Mujer - Relatos Eróticos

Como conocí a mi Mujer

... muslos...
Manos a tu espalda! Ordenó. Con un tono que no daba opción.
Obedeci esa orden. La primera de muchas...
Me tuvo de rodillas lamiendo y besando su tanga hasta que me apartó la cara. Me levantó del cabello, se giró... la seguí. Llegamos a su habitación, la cama era inmensa como el maracana. Me senti como esos cristianos a los que llevaban a la arena del circo para que se los comieran los leones..
Que haces aun con ropa? Me preguntó...
Bati el record mundial en desnudarse...
Me quedé en bóxers... ella se habia despojado de la bata con un gesto felino. Su lenceria roja, su piel blanca, su cabello rojo... era la viva imagen de la guardiana del infierno de los fornicadores.
Me acarició el torso y tocó mi boxer como sopesando el contenido...
Comencé a besarla su boca, su cuello, sus hombros... cuando trataba de bajar a sus senos ella me apartaba riendo.. pero sin dejar de tocarme por encima del boxer.
Yo estaba con una ereccion maxima. Me empujo a la cama. Me sacó los boxer con un gesto rapido y experto. Deslizó su tanga dejandola caer en sus tobillos, se deshizo de ella con un gesto gracil y natural, como cuando iniesta se cambiaba el balon de un pie a otro mientras avanzaba... 
Yo a esas alturas del partido estaba ya entregado... no la iba a follar, ella me iba a follar a mi...
Se sento a horcajadas sobre mi pecho, me miró desde arriba... su cabello caia a los lados se cara enmarcandola, sus ojos verdes fijos en mis ojos... me abrio la boca con sus dedos, se ...

... inclinó un poco sobre mi y soltó un largo hilo de saliva que me llegó hasta el alma. Luego sonrió, se acomodo mas arriba de mi cuerpo y puso su sexo en mi boca...
Sabía que debía hacer... lamer como no había lamido en toda mi puta vida... y lo hice... como un galeote que rema encadenado a una galera turca... con toda el alma. Ella tenía que gozar sl maximo aunque me quedara sin lengua en el intento...
Verla estremecerse y oirla gemir aquella primera noche sentada en mi cara es algo que será mi ultimo recuerdo en esta tierra.
Fue mucho lo que lamí, me dolía la lengua y la mandibula. Pero no paré. Hasta que jalandome del cabello ella me apartó de su sexo. 
Mmmmmm- me dijo con los ojos aun brillando- que lindo cachorrito lamedor encontré en la calle hoy!
Se recostó a mi lado transpirada, las gotitas de sudor perlaban su piel, mi boca sabia a ella...
Trate de girarme de costado y abrazarla contra mi. 
- espera- no seas ansioso! Vas a tener que aprender los tiempos y los ritmos si quieres que lo nuestro dure...!
“Que lo nuestro dure”???? La frase estalló en mi cerebro! 
Hubiera escalado el everest a pata coja por que durara... mire a aquella Diosa infernal y me dieron ganas de hacer el avión por el pasillo como si hubiera metido el gol de la final de un Mundial. 
-Quieres algo? Le pregunté.
-Si. Que siempre sepas quien manda...
Sonrei con su broma...
-Si- Respondi sonriendo.
Ella giro su cara clavandome esos inmensos ojos verdes con una intensidad que nunca habia ...