Lindo Viaje - Relatos Eróticos

Lindo Viaje

... pierna, como para ir acercándome de a poco y estudiar la reacción de él. Deje que mi cabeza fuera “cayendo” sobre su hombro, poco a poco yo mi respiración se agitaba, mi cabeza esta en la encrucijada de que fuera aceptada o de pasar el papelón de mi vida. Pensaba que si no me aceptaba, cualquier macho solo se haría el tonto, pero si era gay y comenzaba a quejarse con la tripulación!!!, donde me metía. Cumplir mis sueños estaban por arriba del posible papelón, por lo que lleve mi mano sobre su entrepierna esperando que el calor de mi mano produjera la reacción de una buena pija, se pusiera dura y comenzara a latir buscando descargar su leche en algún lado. Al poco tiempo sentí que Damian se acomodaba y también que en su entrepierna algo se trataba de mover, como pequeños corcoveos, entonces me atreví mas y mi mano se metió por debajo de la manta, la oscuridad no es tanta pero en esa penumbra hay que estar muy atentos para saber que pasa en un asiento doble. La sorpresa es que me encontré con la mano de Damian bajando el cierre, sin decirnos nada yo apunte mas alto, desabrochar el pantalón y bajar el cierre, así tendría mas espacio para gozar del pedazo de mi acompañante casual. Por supuesto no opuso resistencia y con algunos movimientos tuve la pija en mis manos, fue una experiencia nueva, conocer por el tacto, siempre las había tenido a la vista y después las había gozado. No era gigante pero tenía buen tamaño, la agarre y cerré mi puño sobre su tronco, bien en la base y creo ...

... que media un poco mas que un puño y medio hasta la cabeza. Comencé un buen subí baja en ese tronco y empezó a removerse de placer, me acerque a su oído y le pedí: “No te muevas mucho que nos pueden descubrir”. Pero fui muy puta, después de haber pedido eso, me acomode y metí mi cabeza debajo de la mantita y mi boca busco ese pedazo vibrante, el casi saltó cuando me la comí con la boca y empecé a succionar. Fue difícil por que no me podía mover mucho, era mas trabajo de lengua y succión, pero trajo el beneficio de que me empezó a acariciar la espalda y buscaba llegar a mi culo. De repente sentí que se tensaba todo y era por que largo el chorro de leche, mmm…!, exquisito y muy mucho, casi me ahogo de la cantidad, pero lo goce bien y seguí succionando para dejarlo sin ganas por un rato, el viaje era largo y quería aprovechar ese tiempo a oscuras. Resulto ser todo un caballero, ya que apenas salí de chupársela, me agarro y me dio un beso de lengua que me dio vuelta, sus manos buscaron mis lolas y las encontraron, las tomo y con habilidad llego a mis pezones para apretarlos suavemente, se acerco a mi y me dijo que quería darme el mismo trato que yo había tenido con él. Para que lo dijo, me acomode bajando mi pantalón y tanga hasta bien abajo (siempre cubierta por mi manta y parte de la de él) su mano comenzó a acariciar mi entrepierna y busco mi concha, jugo con mi lengüeta y busco mi garbanzo, yo estaba bien mojada, así que eso le dio la facilidad de meter sus dedos, primero uno ...