Secretos en la granja I
Fecha: 06/01/2018,
Categorías:
Gays
Autor: mena55, Fuente: SexoSinTabues
Parte I Marco era hijo de granjeros, tenía nueve años. Tenía dos hermanos más, Alberto de 11 y Javi de 12. Sus padres dedicaban todo su esfuerzo y trabajo a la granja y al campo. Era verano, no había clases, Vivian en un pequeño pueblo de León, más que pueblo aldea y muy rural. Mas desayunar marcho, se había levantado el último. Marcho hacia la granja, donde seguro estaría su hermano Alberto ayudando a su padre. Se metió, sin hacer ruido. Oyó las voces de ellos dos, al final. En la nave tenían cerdos, vacas. Se agacho, dispuesto para darles un susto. Pero el susto se lo dio el, cuando llego al final, una cuadra de cemento, donde su padre guardaba la paja, comida de los animales. Junto a esa cuadra, su padre tenía a un cerdo, el macho, el que se dedicaba a preñar a las cerdas. Estaba en la jaula, junto a él, su padre y hermano. Por algunos agujeros de la pared pudo ver lo que estaban haciendo y diciendo. -Alberto- papa, hoy el cerdo tiene el culo caliente ¡ehhh! -Roberto- tú lo dices… mira como le meto la zanahoria por el culo… -Alberto- ¿se la vas a meter por el culo? eh papa -Roberto- sí, claro… los dos… ¿oh no? -Alberto- también ¿te la chupo, papa? -Roberto- sí, sácala y hazme una mamada, la tengo ya a tope… ¿le sacamos el pito, al marrano? -Alberto- sí, se lo quiero chupar y que me lo meta por el culo -Roberto- yo creo que iré probando a metértela por el culo, Javi tu hermano no tiene ya problemas -Alberto- sí, ya lo sé, bien que le gusta ser jodido… ¡como a mama! Marco ...
... miraba, con sorpresa aquello y sin entender nada el porqué de aquello. Alberto se arrodillaba para sacar del mono que su padre llevaba el duro miembro, que jamás había visto semejante cosa, para él, aquellos casi 16, le pareció un monstruo. No se explicaba el porqué su hermano se lo chupaba, lo lamia, de rodillas le comía la cola a papa que le oía suspirar y gemir. -Roberto- sí, chupa, chupa… lo haces muy rico hijo, espera, se la voy a meter al marrano por el culo, coge el bote que está allí… anda tráelo -Alberto- le gusta al marrano que le den por el culo… luego se la meteré yo -Roberto- lo que tú quieras… tenemos también a las cerdas… esas piden también rabo -Alberto- ahora estamos con este… ¿le saco el pito, eh papa? quiero hacerle una chupada -Roberto- no, ahora no… ¡metele tú la zanahoria por el culo! -Alberto- vale, tiene el culo bien abierto el muy cerdo… -se puso de pie y le enchufo de nuevo la zanahoria por el culo- eso es, marrano, cerdo… como te gusta que de por el culo… luego tendras la de papa, para que te llene… -Roberto- eso es hijo, ábrele el culo que ahora le voy a llenar el culo -Alberto- joder como le gusta, al puerco… como al Toby –era el perro, mastín- a ese también le gusta que le den por el culo y al tío también le gusta joderse el culo de Toby… y a mama le encanta estar enganchada al perro… Marco no había entendido mucho el final, mama, el tío… pero tampoco comprendía lo que su hermano había querido decir. Solo miraba como su padre le metía la cola por ...