1. Me cogería al putito, pero el putito resulté ser yo


    Fecha: 06/01/2018, Categorías: Gays Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    ... que no vieran nada. No estaba muy seguro de que esto estuviera bien, pero en lo que llegaba a casa seguramente me arrepentía. Voltee con Esteban para decirle que podía comenzar y vaya sorpresa me llevé cuendo me di cuenta de que se había desnudaso mientras yo cerraba. Pasé mi mirada por todo su cuerpo, estaba muy, muy diferente. -Quítate todo -ordenó. -Pe-pero solo será una chupada -dije nervioso. Este chico me puso nervioso y con mi verga muy dura. -Si, pero vamos a hacerlo bien. Ahora quítate todo -dijo con una voz un poco mas varonil de lo normal. Le hice caso, me quité todo, quedando completamente desnudo. Por alguna razón me sentía intimidado, como si estuviera a su merced. No podía quitar mi vista de su pene, era grande, no sabía cuento medía pero seguramente rondaría los 20cm. Se acercó a mi a paso lento, cada centímetro que avanzaba mi corazón se aceleraba y mi deseo aumentaba. Ya no quería solo una mamada, ahora quería cogermelo. Llegó hasta mi y me besó, pegó su cuerpo desnudo al mio, dejándome sentir su erección. Llevé mi mano hasta ella y comencé a masajearla, se sentía bien tenerla entre mis manos. Esteban llevó sus manos hasta mis hombros, separó el beso entre nosotros y me indicó que me incara. -¿Qué? -pregunté perplejo. -Tu dijiste que me harías una mamada -Yo no. -Vamos, primero hazmelo y luego yo a ti. Eso cambió un poco las cosas, pero seguía sin estar muy convencido. Aún así me arrodillé, su verga quedó frente a mi rostro, la tomé con mi mano y la dirigí ...
    ... a mi boca. Me la metí hasta el fondo y la saqué un par de veces, succioné en su glande, pasando mi lengua como un niño en su caramelo, pasé mi lengua, desde la punta hasta la base, quedándome lamiendo sus testículos, esto me estaba encantando, Esteban comenzaba a gemir. De nuevo la metí a mi boca pero esta vez perdí el control, Esteban me tomó del cabello y comenzó a cogerme por la boca, me daba grandes embestidas que me la metían hasta el fondo y casi me hacían ahogar. Se detuvo y lo sacó rápidamente, me tomó del brazo y me ayudó o mejor dicho obligó a levantarme, cosa que no me agradó, quería seguir ahí, sintiendo su verga en mi boca. Hizo que me sentara en una de las sillas y abriera mis piernas. Se arrodilló frente a mi y se llevó mi pene a su boca. -Ah, si, vamos putito que bien la mamas -dije entre gemidos, y era cierto, era la mejor mamada que recordaba. -Veremos quién es el putito -dijo por lo bajo. Sentía su lengua pasar por todo mi pene, bajó basta mis testículos y siguió mas allá, llevando su lengua a mi culo. -Oh -solté un gran gemido- no ahí no -dije tomándolo del cabello y obligándole a volver a mi verga. No dijo nada y solo siguió chupando, hasta que de nuevo comenzó a bajar hasta llegar a mi ano. Quise quitarlo de nuevo pero me gustó y dejé que continuara. Momentos después me hizo ponerme en cuetro en el suelo y siguió lamiendo mi culito. Usaba sus manos para apartar mis gluteos mientras con su lengua se abría paso en mi ano. De pronto sentí que me introducía ...