Al cuidado de su hermana embarazada
Fecha: 08/01/2018,
Categorías:
Erotismo y Amor
Autor: Crusnik, Fuente: CuentoRelatos
... los gemidos de Liz y el chapoteo de su vagina de la cual emanaban jugos, colocando dos dedos, primero los metió en forma estirada y luego comenzó a usarlos para hurgar dentro hasta que por fin pudo conseguir el tan codiciado orgasmo.
Ayudó a limpiar y vestir a su hermana, quien estaba apenada por el hecho. Durante la cena que Alejandra había preparado, Liz se disculpó.
—Lo siento, es que estoy muy sola. Y bueno las hormonas durante el embarazo.
—No te preocupes.
—Gracias… ¿Cómo supiste dónde hacerme eso? Nunca me había corrido así… Perdón. —dijo Liz totalmente apenada.
—Es que conozco mi cuerpo e hice lo que me gusta. —dijo Alejandra, sin inmutarse— parece que tu cuerpo es igual.
—¿Qué?
—Además, estuve leyendo libros de psicología y anatomía humana donde aprendí lo que pasa con tus hormonas en estos meses de gestación y sé dónde están las zonas erógenas. Si quieres luego del almuerzo te enseño.
Para Alejandra que es de una personalidad más desenvuelta la charla no significó mucho, mientras que su hermana estaba anonada y con muchos pensamientos dando vueltas en su cabeza.
Antes de acostarse Alejandra pide a Liz que se desnude.
—¿Perdón?
—Desnúdate. Te dije que te iba a enseñar y lo haré. —mientras Alejandra se quitaba las pocas prendas dejando ver sus grandes tetas firmes, su ...
... coño peludo y sus carnes amplias.
Alejandra se desnudó dejando al aire sus grandes tetas de pezones rosados. Luego, Liz se quitó sus prendas dejando ver su coño peludo y sus tetas grandes y firmes de aureolas oscuras.
Alejandra empezó a tocarse los pezones con sus manos sobando sus tetas, luego bajó a su coño mientras con la otra mano se empezó a tocar el chochito.
Liz estaba anonada, con los ojos totalmente abierto hasta que Alejandra la sacó de su trance al decirle que haga lo mismo.
Al ver que no reaccionaba, Alejandra tomó a su hermana por la espalda, rodeando su gran barriga, acariciando su coño peludo y sobando su vagina. Su hermana empezó a gemir y a humedecerse. Los gemidos empezaron a excitar a Alejandra, quien tumbó a su hermana en la cama y la abrió de piernas empezando a lamer su coño. Era la primera experiencia lésbica de ambas. Liz empezó a acariciar los pezones de su hermana.
Sin darse cuenta, ambas estaban con las piernas abiertas masturbando a la otra, metiendo los dedos en el coño de la otra. Lamiéndose y sobándose entre sí. Hasta que luego de varios minutos donde el cuarto se llenó del olor del sudor, aromas salados con sonidos acuáticos y gemidos ambas se corrieron.
—Creo que hasta el bebé se vino —dijo Liz.
Luego se dieron un apasionado beso empezando una relación lésbica.