ALIMENTO PARA OSOS - Relatos Eróticos

ALIMENTO PARA OSOS

Está historia es de hace varios veranos, días largos y de calor. Yo me encontraba en la casa de mi primo, jóvenes nosotros nos pasábamos las tardes enteras jugando jueguitos, para ese entonces yo tenia 16 años y estaba en edad de conocer el mundo. Mi primo un año mayor que yo, ya era bastante maduro para su edad y sabía de sexo; no les dije pero yo era muy inocente en ese entonces, la cuestión es que mi primo me hablaba sobre las cosas que hacía a escondidas, me contaba como se tocaba y me preguntó si yo ya había debutado, claramente yo era re virgen lo único que hacía era sacudirmela como desodorantes vacío mirando porno. Cómo buen orgulloso le dije que ya había cogido con varias mujeres, el no me creía y me hizo una apuesta para "creerme", la apuesta era básicamente que vaya al quincho (dónde estaban los albañiles arreglando) y les diga a ellos que ya había debutado. Si lo leen parece una pavada, y nadie lo haría, pero yo como les dije soy orgulloso y quería aparentar que ya había cojido y sabía del tema, así que fui, entre en el quincho, para ese entonces los albañiles estaban almorzando era su momento de descanso. No sé sinceramente que es lo que pasó, pero uno de ellos (Javier) estaba sentado de costado y pude notar que tenía el pantalón roto a la altura de la entrepierna y logra verse como se le escapaba un testículo. Yo hasta ese día decía que solo me gustaban las mujeres, pero a partir de ahí las cosas cambiaron, me calentó mucho ver éso y cuando fui a decirles lo ...

... que debía (para cumplir la apuesta de mi primo) ellos empezaron a reírse y dijeron que era imposible que no sea virgen, esto me re molesto por qué no solo mi primo se reía sino que también los albañiles, el único que no se rió fue Javier, que me miró a los ojos entre las carcajadas de los otros y me dijo demostralo, yo me quedé pálido sinceramente y le dije como? A lo que el respondio: no necesariamente tiene que ser con una mujer tu primera vez, mientras cruzaba las piernas y su testículo salía aún más afuera. Yo en ese momento no sabía que pensar o hacer, solo me quedé en silencio rodeado de hombres fuertes y grandes con una mirada penetrante sobre mi, fue un instante pero pareció una eternidad, Javier se rompió aún más su pantalón con la mano dejando a vista un pene grueso y carnoso, yo no entendía que pasaba pero en el fondo me gustaba. El me dijo vas a tener que comerte esto si de verdad no sos virgen, y mientras otro compañero de el se levantó y me tocó la cola; que situación compleja, estaba rodeado de machos y teniendo una erección, yo que me auto proclamaba heterosexual. Todos comenzaron a aplaudir y me dijeron que lo haga, obviamente me acerque hacia el, esa verga jugosa me volvía loco, y de un momento para otro me empujaron la cabeza contra la verga de Javier, pude sentir ese olor a hombre y como latia ese pedazo de carne, y sin pensarlo me lo metí en la boca, nos les miento si les digo que acabe al instante, la situación de estar arrodillado frente a tantos machos y ...