Un trio con mi sobrino, mi Dalmata Tary y yo II - Relatos Eróticos

Un trio con mi sobrino, mi Dalmata Tary y yo II

Resulta que luego de mi sobrino tener su primera experiencia sexual con mi Dálmata pues se encariño mucho con la perra y conmigo, él es un niño extrovertido que le gustaba hacer travesuras, el chico es muy calentón y al menos en casa cuando esta solo conmigo se ha cogido la maña de andar desnudo con su verguita al aire y su traserito respingón. Les recuerdo que ya tiene 12 años. Cuando todo comenzó aún tenía 11 años con una verga de 13cm y en su cumpleaños número 12 él quería sobre todo disfrutar de una noche de placer con nosotros. Ese día lo llevamos a la playa, se veía muy lindo con su playerita bien ajustada y nadando, me le acerque y le dije: - No gastes tanta energía que luego voy hablar con tu mamá para que esta noche te deje irte para mi casa. A lo que él muy contento dijo que sí, y salió de agua y se tumbó debajo de la sombrilla a tomarse un helado que le había traído su mamá. Conforme con lo planeado mi hermana accedió a que Ale se quedará conmigo esa noche a jugar con la consola y como al otro día era domingo no iba haber problemas con que se quedara hasta tarde despierto. Cuando llegamos a la casa lo envié directo a la ducha. Ya Tary estaba preparada pues desde el día antes le había dado su baño y claro pues como todo zoo que soy quien no se ha desquitado con su perra mientras le da su baño jejeje. Al rato salió el niño del baño desnudo pues ya era costumbre para él y con sus intenciones bien claras porque ya tenía su verga paradita. Se me acerco y me dijo: - ...

... Tío creo que aún le falta un poco para estar lista, me la puedes chupar un rato. A lo que yo por instinto propio y los deseos que tenía lo cargue y lo lance para la cama acostado boca arriba y me metí su verga en mi boca mientras el disfrutaba. Realmente mi intención era tenerlo solo para mí sin que Tary entrara al cuarto al menos la primera sesión de sexo fuera entre los dos. La abrí bien sus piernas y comencé a bajar mi lengua hasta topar con su anito y le di par de lengüetazos, sentí como se retorció de placer y se contraía encima de la cama y tenía los ojos cerrados mientras gemía. Entonces me subí encima de él a la altura de su pecho con las piernas abiertas y mi verga quedo a la altura de su boca y le dije: - Mi niño ahora te toca a ti, es tu primera vez, ten cuidado con los dientes, solo tienes que hacer como si fuera un caramelo pero sin morderlo. Con su manito la agarró por el tronco levanto su cabecita y se la metió a la boca, como todo inexperto al principio le era complicado pero a medida que pasaba el tiempo iba mejorando muchísimo y yo sentía un placer descomunal mientras me apoyaba en la cabecera de la cama, la sensación de tener esa boquita comiéndome la verga era riquísima. Luego de un tiempo le dije, que ya era hora de hacerlo mío, entonces cambamos de pose y lo acosté boca abajo y ya tenía listo el lubricante, y volví a mamarle su anito y meterle su primer dedo para prepararlo al tacto de su agujerito sentí como su espalda se erizaba, para mi realmente este ...