En la playa
Fecha: 26/01/2018,
Categorías:
Hetero
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
Fuimos a pasar un fin de semana fuera, después de una cena romántica el sábado nos retiramos al hotel donde hicimos el amor hasta decir basta, a la mañana siguiente y después de desayunar en la terraza de la habitación mirando el mar, decidimos que pasaríamos el día en la playa, así que agarramos las cosas y nos fuimos con el coche a un lugar especial, se llama la playa del Trabucador, es un trozo de tierra que entra en el mar, tiene unos once kilómetros de largo y esta bañado por las dos partes. Porque es especial? te cuento. Al principio de este brazo de tierra en el mar toman el sol las familias y a medida que te vas adentrando, la gente esta mas distanciada entre si, hasta que llegando al final hay un acuerdo no escrito que hace cada uno se ponga a unos doscientos metros o mas del otro, en este tramo se practica el nudismo.
Aparcamos el coche y nos instalamos debajo de la sombrilla con nuestras sillas-hamacas, nos desnudamos y tomamos un baño refrescante, en el agua empezamos a besarnos y a jugar con nuestros cuerpos entrando en excitación rápidamente, después de una rato nos fuimos a nuestras sillas y mientras charlábamos nos empezamos a tocar, nos mirábamos fijamente a los ojos mientras nos masturbábamos mutuamente, deliberadamente lo hacíamos muy despacio, disfrutando al máximo de la visión del otro mientra nos toca, tus pechos magníficos, tus pezones erectos invitaban a chuparlos, a morderlos, mientras tu meneabas mi verga y te pasabas la lengua por los labios ...
... insinuando le que iba a venir, pero me hacías esperar para que mi deseo fuera mayor si cabe. Estábamos de esta manera acariciándonos cuando vimos como venia un tipo por la playa, iba desnudo, tan solo llevaba una gorra para protegerse del sol, paramos de tocarnos y nos dedicamos a observarlo mientras se acercaba a nuestra altura, de lejos ya se le adivinaba una media erección, estaba claro que el tipo nos había visto tocarnos, a medida que se acercaba y ya cuando estaba casi a nuestro lado, aflojo el paso y nos miraba fijamente, entonces te dije que te tocaras los pechos, entendiste enseguida cual era mi intención. De la manera mas lasciva empezaste a acariciarte los pechos, sobándolos, tocándote los pezones y besándotelos, el tipo se paro delante nuestro y ante tal provocación empezó a tocarse la verga, enseguida se le puso dura y la verdad es que la tenia muy grande.
Todo este juego te excitaba sobremanera y empezaste a tocarte con más ganas abriendo tus piernas para que el extraño viera todo tu sexo rasurado, el tipo empezó a masturbarse frenéticamente, entonces empezaste a tocarte el coño, abriste los labios de tu sexo y mirabas al tipo para ver cual era su reacción, el respondía a tu provocación meneándosela mas fuerte y mas rápido, te chupaste un dedo de la manera mas provocadora y te lo pusiste dentro de la vagina, repetiste la operación con dos dedos y te follabas a ti misma, entraban y salían con un cadencia pasmosa, estabas totalmente mojada y disfrutando del morbo ...