Mi primera vez fue con mi padre - Relatos Eróticos

Mi primera vez fue con mi padre

15 años acabados de cumplir. Nací en verano. Flor caliente desde mi primera regla, cuando mi cuerpo se hizo mujer, con redondeces grandes y duras, tetas, muslos, culo. Vello púbico. Aquel día estaban todos en la playa. Abuelos, tíos, primos, hermanos, padres...Yo me quedé en la terraza de casa. Quería tomar el sol completamente desnuda. Y sabía que êl vendría. Que me diría que me iba a quemar. Y estaba a punto de arder. Lo vi en bañador, en la puerta de la terraza. Me abrí de piernas y le enseñé todo mi coño abierto. Se tocó por encima del bañador. Me mojé. Su erección era enorme, su capullo salía de la cintura del bañador, rojo  y mojado. Las primeras gotas de semen brillaban al sol. Se quitó el bañador y empezó a masturbarse. Paró de pronto. Entró en la habitación y se acostó. Se tapó con la sábana. Finjía leer. Me llamó, no sabía que yo le había visto. 
"Entra, tendrás una insolación". 
Entré. Rodeada por mi toalla de playa abrí la sábana y me acosté junto a él. No reaccionó, aunque le oía jadear. Me quité la toalla y apreté mis tetas en su espalda. Se quitó las gafas y las dejó lentamente en el suelo, junto al libro. Se giró y me miró. Me metió la lengua en la boca. 
"Entiendes lo que vamos a hacer?"
"Sí, vamos a follar"
"Quieres que papá te folle"?
"Sí, papi, fóllame, lo deseo hace mucho".
"Ufff, llevo mucho tiempo esperando este momento".
Nos besamos. Me tocó las tetas y el culo. Yo ke toqué el pecho peludo y le cogí la polla. Era enorme, grande y gorda. Le ...

... masturbé y todavía creció más en mi mano. El capullo marcado, el agujero grande. Estaba tan mojado que el líquido preseminal desbordaba su capullo y bajaba por el pene hasta mi mano. Rocé el agujero, ancho; me lamí los labios. Me iba a llenar el coño hasta artiba de leche. Me relevó y siguió meneándosela él mismo. Yo aproveché para tocarle los cojones. Le colgabsn bien gordos, duros al tacto, llenos de esperma. Metí los dedos entre los pelos del escforo y acaricié la piel de sus huevos, rugosa pero suave, muy caliente. Me abrí de piernas y se puso encima. Me tocó la vulva mojada y grité de placer. Me masturbaba el clítoris. Repartía mi flujo por los labios y el clítoris. Ahora pasaba su capullo por todo mi coño. Me iba a penetrar esa polla enorme. Metió los dedos para desvirgarme y lo hizo muy rápido. Sentí como un dsgarro en mi tela de seda. Me quejé. El dolor fue rápido. Me pasó el capullo por mi clítoris y netió la lengua en mi boca. Me calmé y le supliqué que me follara. Apoyó el capullo en la entrada de la vaguna y empujó. Suave pto sin pausa. Me penetró hasta que el capullo tocó mi cervix, mi entrada al útero. Empezó a dar golpes pélvicos. Me follaba duro y yo estaba gozando como una perra. La polla era enorme y yo estaba mojadísima. Lo hacíamos a pelo. Yo sabía que iba a eyacular dentro y todavía me sentía más guarra. Gemíamos. Puro placer. Fruta prohibida. Estaba agotada. Llevaba una hora joduéndome y haciéndome correrme una y otra vez. 
"Ya no puedo más, papá está a ...