DON PINCHO, LA METE RICO - Relatos Eróticos

DON PINCHO, LA METE RICO

Soy Paul, en mi colegio sabían que era homosexual, pero no me fastidiaban, los profesores hacían respetar a todos las condiciones personales; ya dejaba notar mis ojos maquillados levemente, mis tetas habían crecido gracias a que tomaba las pastillas de hormonas que traia mi madre, como era enfermera, siempre unas de mas. Uno de esos días mi padre dice que vamos de viaje al interior a pasar días de descanso, mama se alegró y al lugar donde íbamos a ir era de la tía Perica, hermana de mi madre, era una pequeña granja con algunos animales y peones negros, según contaba papa; nos fuimos dispuestos a descansar, yo a conocer, mi culo extrañaba a Toño mi semental y mi padrino anal; pero recordaba lo que me dijo que la verga de don Pancho era más grande, mi culo se agitaba al volver esos recuerdos. Cuando llegamos unos peones cargaron las maletas y las llevaron a unas habitaciones, mama y papa se saludaron con mis tíos, yo sentía los apretones de mi tía y si que era fuerte, cuando se abrazó a papa para saludarlo, él con disimulo le metió la mano por las nalgas y ella sonrió complacidamente, me di cuenta la razón entonces de este viaje, mi padre quería cachar con la tía. Mama se sentó en la sala a conversar con el tío Paco, esposo de mi tía, hablaron de todo y buen rato; yo Salí a dar una vuelta por el espacio campestre y vi unos jóvenes mestizos trabajando con los caballos y me acerqué a ver, estaban inseminando una yegua, otro estaba haciendo copular una pareja, en ambos casos ...

... eran unas vergas enormes, me dije que como seria la verga de don Pancho, mi culo se empezó a agitar y sin darme cuenta lo levanté y un obrero me dice …Joven le gusta lo que ve?. Yo: si, si… Si quiere venga a coger esta pinga esta suavecita… Yo: no me da miedo…. Venga yo le enseño…. Yo: me ayudas…Si, lo ayudaré, venga… Me acerqué el peón se puso detrás mío, me hizo estirar los brazos y puso la verga del caballo en mis manos, yo sentía su aliento en mi nuca, su olor a campo, su verga dura detrás de mi culo, mis nalgas se habrían solas, tenía la verga del animal en mis manos y la verga del peón en mi culo, quería bajarme el pantalón, pero no era posible; un peón negro miraba y se sacó la verga, inmensa, fuerte musculosa, con una cabeza sonrosada y redonda…Quieres coger esta también…. Ja, j aja ja…. todos se rieron, yo me solté y Salí corriendo a la casa. Ya en mi cuarto miraba mis manos todavía quedaba los jugos de ese animal, y en mi culo el calor de esa verga del campesino, en mis ojos la figura del pincho del peón negro; saqué mi ropa y así desnud@ me masturbé por los dos lados, luego me duché…será de ese tamaño la pinga de don pancho?. Cambie de ropa tanto de afuera como de interiores, me puse unos calzoncitos chiquititos, que levanten mis nalgas, habían peones ricos, negros con la boca roja y mestizos fuerte con brazos macizos, y unos bulto grandes entre las piernas. Esa noche en la cena todos hablaban de sus avances, papá, mamá, mis tíos, y hasta muy tarde repartieron licor ...