Masaje lesbio casual
Fecha: 03/02/2018,
Categorías:
Lesbianas
Autor: Dxgirls96, Fuente: CuentoRelatos
Debido al estrés originado por mi trabajo extra que tenía decidí ir a que me dieran un masaje, aunque no sabía a donde ir ya que no quería irme a uno tan caro para que me den solo un masaje hasta que se lo comenté a Rebecca mi amiga de cual les conté en el primer relato que les compartí, ella me dijo que tenía una amiga que me podía dar un masaje con un descuento especial por ser su conocida, así que dije: ¿Por qué no? Y me dio la dirección del local y le avisaría de la reserva para mí a la hora que podía y me dijo que estaría esperándome.
La dirección que me dio no estaba tan lejos como creía, cuando llegue note que era un local no tan grande de dos pisos, entre y vi a la amiga de Rebecca en la recepción era una chica bastante simpática con toda pinta de gringa, piel clara con pecas ojos verdes y su cabello era marrón claro y recuerdo que le llegaba a los hombros, si bien no sabía aun su edad note que era menor que yo; entonces ella me vio y me dijo muy amable: Tú debes ser Lucero, ven pasa. E ingrese con ella al lugar y comenzamos a charlar de como conoce a Rebecca y esas cosas; resulta que ella era vecina de Rebecca hace varios años y que aunque ya no sean vecinas siguieron en contacto, su nombre era María (así como se pronuncia sin tilde) tenía 25 y además no tenía tiempo para una relación formal según ella.
En fin ella me dijo que pasara a desvestirme y que me pusiera la bata de baño, ya con ella pase a una sala donde había uno de esas camillas con un lugar para ...
... poner la cabeza, me pidió que me quitara la bata y que me acostara boca abajo. Con la cabeza mirando al suelo y completamente desnuda me dispuse a conversar mientras me masajeaba la espalda ¿Este local es tuyo? Le pregunte. Claro que no, me dijo. El local le pertenece a mi jefe, solo que esta fuera de la ciudad y me lo dejo encargado este fin de semana. Ya veo. Le respondí. Entonces eres la única que trabaja aquí? No somos varios. Me respondió. En realidad se supone que este fin de semana debería estar el local cerrado pero como Rebecca sabia aprovecho para decirme darte esta sesión privada con descuento especial; ya que yo tengo las llaves no hay ningún problema. En ese momento comenzó a echarme aceite a mi espalda y comenzó a masajeármela, me sentía tan a gusta con sus manos en ella, en eso comenzó a descender sus manos hacia mí colita haciendo que suelte un suspiro de la sorpresa .Entonces me dijo: ¿Estas bien? Sí todo bien, solo que bajaste sin avisar, le conteste. Bueno sino te sientes cómoda no paso por esa zona. No normal, respondí. Sigue solo que me tomaste por sorpresa, y prosiguió con el masaje.
Con sus tersas manos comenzó a masajear mi culo, suavemente sujetaba mis nalgas llenas de aceite moviéndolas de arriba abajo lo que me hacía excitarme por lo que decidí retomar la conversación para que no lo notara. ¿Cuánto tiempo llevas en esto? Pregunté. Hace unos años empecé a llevar un curso de masaje y con algo de suerte conseguí trabajo rápido. Me lo decía mientras ...