Mi suegra es increíble - Relatos Eróticos

Mi suegra es increíble

... que amenazaba con romper el pantalón.  Le bajé los tirantes de su blusa e hice a un lado su sostén, mis labios chuparon sus bellos senos y sus pezones, ella comenzó a excitarse, lo veía en sus ojos.  Terminé por quitarle toda su blusa y sostén, ahora tenía sus senos libres para mi.  Los mamé de arriba para abajo,  Ella me fue desabotonando la camisa y me la quitó, entonces yo le bajé el cierre de la falda y  se la saqué de sus piernas, había quedado solo con su braga.  Ella me abrió el pantalón y me dijo -quítatelo-,  asi quedamos solo con nuestra ropa más interior.

La besé y la eché para atras quedanod semiacostada en el sofá,  le saqué su braguita, quedó libre su sexo, recortadito, sus labios vaginales se abrieron como pétalos frente a mi, no pude aguantar darle una lluvia de besos, lamidas y lenguetazos a su raja, me la estaba devorando viva, ella comenzó a gemir y a tomarme la cabeza y jalándomela hacia su sexo, ella quería más intensidad, y yo se la dí, metía la punta de mi lengua en su raja y apretaba con mis labios su clítoris, a la vez que un dedo y luego dos, se insertaban en su vagina masturbándola, los gemidos de Ely inundaban la casa, mientras gritaba -asi cariño, asi, asiiii-,  de pronto siento que mis dos dedos se mojan intensamente a la vez que ella retuerce su espalda, está teniendo un orgasmo.  No ya no puedo aguantar más todo esto y quitándome los calzones, me pongo entre sus piernas, pongo mi verga dura en la entrada de su vagina y comienzo a ...

... penetrarla.  Mi pedazo de carne va abriendo el canal de su raja, ella me abraza y me pega contra ella, quedamos los dos bien unidos, por la boca y por nuestros sexos, yo entrando y saliendo de su cuerpo en un frenesí indescriptible.  El vaiven de nuestros cuerpos en armonía absoluta, gimiendo a todo pulmón.   Ella y luego yo empezamos a corrernos, una gran cantidad de esperma inundó su vagina y ella al venirse me clavó sus uñas en la espalda, eso fue fenomenal, mezclar dolor con placer es increíblemente placentero.

Luego sin esperar ni descansar, la puse hincada en el sofá dándome la espalda, su linda colita quedó frente a mi, no pude evitar darle una chupada de nalgas y de culito a Ely, mientras le clavaba de nuevo dos dedos en su raja, pude sentir toda su lubricación mezclada con mi semen allí dentro, además estaba calientísimo.  Un minuto más y volví a poner mi verga en su raja y comencé a darle buenos empellones y ella movía sus caderas como bailando salsa o merengue, fue riquísimo.  Para ese momento estabamos sudorosos, la tomé de su nueva cintura y se la metí hasta lo más profundo de su vagina, ella gritó y gimió se estaba corriendo otra vez.  Yo segundos después, bombeandole mi verga frenéticamente volvi a eyacular dentro de Ely.  Luego vino la fase de recuperación, solo nuestras respiraciones eran audibles en toda la casa.

Ella fue la primera en decir algo -estoy muy sudada cariño-, me daré una ducha rápida, tomó sus cosas, y desnuda empezó a caminar, su figura a pesar de ...