Mi pasión en familia - Relatos Eróticos

Mi pasión en familia

Buenas noches, antes les conté como una simple palabra cambio todo para mí, y es que ser padre de tres, esposo y laburante fue agotando algo en mí, de joven siempre fui impulsivo y bastante ligón, en ese entonces cojerme a  alguna chica en un bar era la entrada de la noche, y entonces llegó Ema, preciosa curvilínea, pequeña con un cabello  salvaje y su forma aniñada tan dulce, sus pechos y culo eran un reloj de arena y no me saciaba de ellos, ella fue mí gran amor, y aunque sus dudas para cojer me enloquecían la esperé. Un mes después la tuve en  mí habitación, debíamos estudiar,  pero la abrace y desnude antes que pudiera pensar, la tomé en misionero después de besarla entera y de comer su coñito virginal, ella se dejó y desde allí siempre estábamos encima del otro, embarazarla era cuestión de tiempo y cuando pasó ya tenía un anillo para ella, por 15 años aunque la amo, me fui dejando estar, solo me di cuenta de eso cuando fui su papito, pero también note que no podía ser solo su papito, su sobrina fue la primera pero cuando retome fuerzas supe que no podía ser la única, mi Ema viene de una familia con muchas muchas mujeres, su madre es viuda ahora, su hermana mayor Lara, madre de mí dulce sobrina, y trillizos, y su hermana menor Maya, soltera y sin pequeños, que se parece bastante a la Ema joven, toda aniñada y dulce, es profesora y al igual que Sandra mí sobrina, con ella solo pasó.
Una noche, después de jugar a destrozar el culito de Ema, ella me cuenta que Maya ...

... volvía a la ciudad por trabajo y que quería ayudarla pero no le daba el horario, me ofrecí en su lugar y mí muy agradecida esposa me montó ofreciéndome sus ricos pechos, esa noche no la dejé dormir.
Llegó el día de la mudanza y fui por mí cuñada al aeropuerto, ella me divisó y corrió feliz hasta mí, conversamos todo el trayecto y ya en el nuevo departamento, si amueblar y con sus cosas en cajas, simplemente la abrace desde atrás, recosté mí cabeza en su hombro y le dije "bienvenida maestra", Maya estaba roja y tartamudeo un gracias, la iba a soltar pero ella hace una pregunta según ella inocente, me dice " y el papito qué tal está? Los niños no te agobian?" Así que solo hice lo que mí pija me pedia, pegue mí erección a su culito redondo, mas pequeño que el de Ema, pero aún así suave, tome sus pechos en ambas manos y mordí su oreja, le susurré que se lo busco, que le mostraría lo agotado qué estaba, ella estaba paralizada, creo que intentó disculparse pero le mordi los labios, no habrían besos para ella, era muy dulce y quería cojerla, hacerla gritar, no quería ser tierno para nada, así que la lance a la pared posicione su culito para mí, rompí su pantalón de yoga y solo moviendo su culotte con conejitos le clave mí erección de una estocada, ella gritó pero no me detuve, la novia como una muñeca haciendo que se apoyará contra la pared así podía jugar con sus pechos, morderla a placer y clavarla al mismo tiempo, ella se dejó hacer y cuando me apoye en ella sentí como lloraba, la ...