La hijastra de mi cuñado 3 - Relatos Eróticos

La hijastra de mi cuñado 3

Este relato es 100% real y yo lo viví, aquí les dejo el final.

La lubriqué con mucha de mi saliva, como su pelvis estaba tan cerca a la mía eche hacia atrás mi pelvis para así poder poner la punta de mi verga en la entrada se su vagina, la empuje solo unos milímetros para que no se moviera de ahí y con ambas manos cogí a Valeria por las caderas, apoyándome en los huesos de sus caderas para jalarla hacia mi, la cogí fuerte y empecé a penetrarla lentamente, en esta pose veía como mi verga se abría paso a través de sus labios mayores y empecé a sentir la presión de su vagina, pero solo había entrado como centímetro y medio no más, aún no había entrado toda la cabeza de mi verga la cuál media un poquito más de 4 cm de larga y de ancho 5 cm, la cogí firme e hice un duro empujón y de una entro la cabeza de mi verga en su totalidad, sentí como mi verga rasgo algo, era su himen, Valeria grito de dolor, se le puso la cara roja y se le escurrieron unas lágrimas de sus ojos, Valeria intento retirarme de dentro de ella, apoyando sus manos en mi abdomen sin poder lograrlo, tenía mi verga a mil, sentía su vagina apretando mucho mi glande pero aún así jale más a Valeria hacia mi logrando que mi verga la penetrara más, veía como mi verga se desaparecía centímetro a centímetro dentro de ella, Valeria seguía intentando frenarme pero sin lograrlo, con la última arremetida jalandola aún de las caderas mi verga entro un poco más de la mitad, unos 10 cm de mi verga estaba dentro de su vagina, ...

... sintiendo esa estreches de su intimidad, sentía mi varga palpitando dentro de su vagina, empecé a sacarsela sin que la cabeza se saliera de ella y volvía a hundirsela nuevamente, esto lo empecé a hacer lentamente, Valeria no lloraba o sollozaba pero si veía sus gestos de dolor y lágrimas brotar de sus ojos, ya llevaba como 10 minutos envistiendola lentamente, decidí penetrarla lo más que se podía y quedarme quieto, aún no lograba que entrara toda mi verga que tenía 18 cm de larga, así intentaba que su vagina se acostumbra a tener mi verga adentro, la sostenía de las caderas para que no se fuera a quitar, le hable y le dije "cálmate un poco, relájate y veras que deja de dolerte" ella se limpio las lágrimas y dijo "es que siento mucho dolor, como si me estuvieras partiendo la vagina en dos", le dije "me voy a quedar quieto un rato para que descanses" Valeria solo asintió con la cabeza, después de unos minutos quitó sus manos de mi abdomen, yo empecé a estimularle el clítoris a ver si esto la relajaba un poco, al detallarme nuevamente de su cuerpo desnudo, su carita que estaba un poco ruborizada, sus hermosos ojos verdes y sobre mis muslos junto a mis caderas sus piernas totalmente abiertas que dejaban ver toda su rajita penetrada por mi verga,  no pude esperar más y empecé a arremeter nuevamente contra su vagina, empecé lentamente pero cogiendo un poco de ritmo, cada vez que mi verga llegaba al fondo de su vagina Valeria apretaba sus ojos haciendo gestos de dolor, ya sus manos ...