NOCHE LOCA - Relatos Eróticos

NOCHE LOCA

... así tres o cuatro, en un rincón del cuarto se encontraba una cama vieja solo con el colchón, una vez dentro me ordenaron. Listo empiézale mamita, y se desabrocharon el pantalón, me senté en la orilla de la cama y empecé a alternar con mi boca ambos penes, no eran la gran cosa pero ambos estaban de buen tamaño, y limpios que era lo importante, uno de ellos, tomo mi cabeza y la guiaba, mientras alternaba mis mamadas me empezaron quitar la camiseta y al ver mi piel depilada se agacharon a chupar mis tetillas, uno de ellos me levanto y me ayudo a quitarme el pantalón, me quite todo dejándome solo la tanguita puesta, trate de dejar mi ropa lo más cerca de mí y mi mochila, al verme solo con la tanguita ambos se me abalanzaron como leones hambrientos y empezaron a mordisquear diferentes partes de mi cuerpo, desde mi cuello hasta mis tobillos, uno se puso detrás de mi y comenzó a morderme las nalgas, eso me puso más caliente de lo que ya me encontraba y le suplique que siguiera, Ho siii así, que rico me muerdes amor, no pares, el otro se sentó en la cama y me pidió que me sentara encima de él dándole la espalda, le pedí que se pusiera un condón, y accedió, lo saque de mi mochila y con mi boca le ayude a ponérselo, después lubrique un poco mi culo con mi saliva y poco a poco me senté en su pene erecto y listo para perforarme, me empecé a mover despacio en círculos, y después él tomo mi cintura y subía y bajaba mis caderas guiándome con sus manos, ¡Que rico sentía! El otro volvió a ...

... poner su pene en mi boca y así me tuvieron dándome verga, gimiendo casi sin poder hablar. Para no dedicarte a esto vaya que eres una puta, se ve que te encanta, decía el que estaba de pie con su verga llenado mi boca. Seguro ya te han hecho un dos romano, dijo el de atrás, entendí lo que querían y le pedí que me suspendiera un poco la cogida tan rica que me daba, corrí por otro condón, me volví subir en su verga dándole la espalda pero esta vez me acosté encima de él, después subí mis caderas y con mis manos me sujete yo misma de mis tobillos, dejando a la vista la deliciosa penetración que me hacía el tipo de abajo, después le extendí el condón con mi mano al que estaba de pie que afortunadamente entendió, y mientras se lo ponía me amenazaba, vaya que eres una putísima, ahora veras la verguiza que te pondremos puta, se coloco el condón mientras yo me untaba saliva abundante en el culo, y sin más le grite: ¡Yaaa, yaaa por favor rómpeme el culooo! sentí la punta en mi entrada y un vacio en mi vientre me invadió, después la mitad y finalmente un grito de dolor se escapo de garganta al sentir todo ese falo dentro de mi, junto con el que ya tenia dentro. Haaay haaaay, que duro lo tienes papacito, me están desgarrando asiiií asiií, que rico me hacen su puta, maaas maaas rómpanme el culo asiii asiii durooo durooo, ¡Hooo que rico es estoooo!, ¡Que puta soooy! Con todo y el calor del momento pude ver al tipo que vigilaba la puerta en un rincón tratando de ocultarse con la tela sucia de ...